Planificar la educación

“En nuestros tiempos esto no pasaba. Respetábamos a nuestros maestros, había clases sin que se ausenten y nadie se proponía que la escuela fuera centro de otros temas” se escucha con repetición. ¿Eran otros buenos viejos tiempos o todo pasado fue mejor? No lo creo. Siempre hubo buenas y malas pero a favor de estos tiempos existe un espacio de mayor libertad que debe ser aprovechado.

Si bien son tiempos de fin de cursos, exámenes y hasta fiestas de egresados con cientos de pibes de nuestra provincia que intentarán seguir un rumbo educativo que le de sustento a sus aspiraciones y sueños; no estaría nada mal que los actores principales del amplio espectro educativo de nuestro Chubut se tomen un tiempo de planificación.

El segundo ámbito de crecimiento de nuestro sentido de la libertad, después de la familia, debiera plantearse un espacio de debate y análisis.

Claro está que existe cansancio por las complejidades que ha tenido el ciclo lectivo y que aún perduran en función de reclamos y respuestas, pero no estaría mal que en un par de jornadas de trabajo, docentes, no docentes, funcionarios y hasta estudiantes y padres (cooperadoras y organizaciones), pongan en papel las proyecciones de un año con complejidad electoral.

Otro sector que podría sumarse a la iniciativa puede ser el universitario, para que la oferta existente en el territorio, pueda ser no sólo mejorada en sus variables, sino de acceso informativo en todas y cada una de los pueblos que tienen secundarias en los extensos 224 mil kilómetros cuadrados del Chubut.

Un posible encuentro podría programarlo la propia Legislatura con su Comisión de Educación, para involucrarse y promover el incentivo de la planificación.

Con un presupuesto presentado y números concretos del sector, no estaría de más considerar su implementación pensando en los lineamientos curriculares, el estado edilicio de los establecimientos, las obras fijando prioridades, la cobertura de materiales y otros aspectos no menores como el transporte operativo y sus costos.

La cuestión salarial tiene en la paritaria su camino establecido y allí gremio y autoridades seguirán sus derroteros.

La propuesta apunta a la posibilidad de anticipar acciones que podrían debatirse con muchos elementos ya establecidos y fuera del cotidiano mundo de los chicos en las aulas.

Hasta podría dividirse en dos etapas, una comarcal y la siguiente general.

El reconocido Paulo Freile hacía mención a la “educación como base de la Libertad”. Para una referencia mundial de la temática “se debe construir el conocimiento, desde las diferentes realidades que afectan a los dos sujetos políticos en acción: aprendiz y maestro”.

No creo que resulte complejo elegir un lugar concéntrico un par de fin de semanas para que se hilvanen los principales aspectos de un tema tan relevante como la educación de nuestros hijos. Pensando en un todo, las partes tienen la palabra.