Incendios intencionales; castigo a los culpables. Nueva entrega de "El Horcón"

Los últimos incendios ocurridos en Lago Puelo y Epuyen fueron calificados de intencionales por las autoridades competentes.

En respuesta a estos graves delitos el ministro de Gobierno Federico Massoni destacó que serán contundentes con la aplicación de la Ley contra los sujetos que provocan estos siniestros. En este sentido, con la intención de esclarecer los hechos, por instrucción del gobernador Mariano Arcioni, se fijará una recompensa de $100.000 a quienes brinden datos para detener a los que provocaron los incendios.

Es de destacar que más allá del daño ecológico y material que provocan estos incendios, nuestra provincia ha sido testigo dolorosa de bomberos que han perdido la vida en anteriores ocasiones.

Hoy  son muchas las personas que arriesgan la vida para sofocar estos siniestros con autoría de inadaptados, pudiendo evitarse esta calamidad, si realmente se investiga a fondo y de una vez se aplican medidas ejemplares contra los delincuentes que provocan tanto daño. i

No hay que olvidar el incendio ocurrido en La Hoya que convirtió en cenizas la confitería La Piedra; también fue calificado de intencional, sin que hasta la fecha se haya dado a conocer el más mínimo indicio sobre cómo sucedieron los hechos que afectaron gravemente el funcionamiento del centro invernal y con ello toda la temporada turística.

Es necesario trabajar con contundencia ante cualquier incendio calificado de intencional, tal como ha anunciado el ministro de gobierno provincial.

También es necesario que este tipo de delito ya sea en un bosque o una confitería, reciba el más enérgico rechazo y a la par la contundencia en la investigación y condena que augura el gobierno provincial.

La gravedad de lo sucedido en El Hoyo y Epuyen debe ser esclarecido. También lo sucedido con La Piedra. Nada es menos grave, al punto que merezca impunidad.

CHISTE DE YAPA

-¿Sabes, Paco? Has notado como mi hija tiene muy parecido a mí el rostro, el cuerpo… ¡es igualita a mí!

-¡Estarás muy contento, Pepe!

-Yo sí… ¡ella no me lo perdona!

Foto: Gustavo Calfín