El Horcón y su visión sobre las PASO: "¿Y ahora?"

La lectura más sólida, que difícilmente se revierta en las elecciones generales de la provincia, es que Cambiemos no será gobierno a partir del 2019 y aunque los números ubican a Ongarato en un segundo puesto en Esquel, el poco tiempo que queda para las generales -salvo cambios muy profundos de dinámica, orientación y definiciones concretas en el gabinete-  lo alejan  de su ansiado segundo mandato.

Su inexplicable apoyo público y protocolar, y permanencia en el cargo del Secretario de Deportes, a poco de haberse conocido un negocio de carnicería en su ámbito, sus problemas con el cloro para el natatorio, la poca presencia en los barrios y gran rechazo de los empleados, hacen comparable su no remoción, solo con la de la responsable del área comunicacional, de notable ineficiencia; por solo mencionar dos ejemplos a los cuales se puede sumar la impericia de la Secretaria de Gobierno. 

En la provincia, la victoria de Arcioni ha sido holgada. En un contexto heredado muy difícil, logró construir una fuerza política que ganó por amplio margen las PASO, aunque su figura, por si misma, con respecto al 2017 perdió una buena cantidad de votos.

El peronismo y la sumatoria de votos logrados se imponen en Chubut, aunque se conoce que el que gana la interna no es el que luego puede aunar los votos del espacio.

La realidad es transversal para todos los que aún tienen más o menos esperanza de ser gobierno. En Chubut hay problemas de fondo acuciantes y delicados (empleo, seguridad, educación, trabajo). No está claro cómo se van a resolver. No hay solución ahora ni se vislumbra a corto plazo. No hay proyecto que proponga un camino claro a seguir.

En Esquel, nada es definitivo, pero en caso de ganar un candidato diferente al oficialismo, los esquelenses seguramente querrán que sea ese el que gobierne. Suponemos que este escenario lo contempló Ongarato al aceptar adelantar las elecciones. Le será extremadamente complejo seguir al frente de la intendencia y completar el mandato, si no es el ganador en junio.

Ya este lunes el contexto era de un candidato y un intendente en dificultades con una retención de servicios del personal, donde el servicio de recolección de residuos –medular para la ciudad- no se realizaba, con todos los inconvenientes que genera, amén del resto de las áreas que estaban paralizadas.

Tampoco hay que olvidar que entre los votos en blanco y los que no acudieron a votar, casi el 40% de los esquelenses, por una razón u otra, no se expresó en las PASO. Hay indiferencia y descreimiento en la política. En el poco tiempo que queda para las elecciones definitivas en la provincia y la ciudad, ese sentimiento – fuerte y preocupante- difícilmente se revierta, pero no es imposible.

El electorado aún tiene el poder de elegir, quien no votó, lo puede hacer. Los políticos de cada espacio seguramente trabajaran con ese voto indeciso o indiferente y en el peor de los casos, descreído. 

Todavía ningún político debía festejar con la euforia que caracterizó a algunos espacios este domingo. En Chubut y Esquel las dificultades y problemas amanecieron con la misma intensidad la mañana del lunes luego de las PASO. 

CHISTE DE YAPA

• Jacobo, supe que murió tu suegra.

   

• Si… la semana pasada…

   

• ¿Y qué tenía?

   

• Nada… ¡solo un dos ambientes!.