La historia de Julieta Magalí Ruiz, la mujer que fue presa por el "Telar de la Abundancia"

En 2016, una joven riojana de 18 años quería poner su estudio de danzas y encontró el método del Telar de la Abundancia, un sistema por el cual la gente introduce sus ahorros en un "mandala" y debe sumar gente, a través del tiempo, para continuar con la cadena de cobros.

En su pueblo, llegaron a participar más de 1500 personas, algunas de las cuales ganaron grandes cantidades de dinero.

Sin embargo, el telar se rompió y casi todos perdieron el dinero depositado. Por lo tanto, algunos decidieron denunciar a la joven, y ella, que tenía anotaciones de cobros y pagos, fue apresada.

Este "telar" se trata, esencialmente, de un esquema Ponzi, un sistema piramidal de inversiones que no resulta sostenible en el tiempo. Es una operación fraudulenta en la que se pagan las ganancias de los participantes con el dinero de nuevos aportantes. El esquema Ponzi solo funciona si crece la cantidad de víctimas, ya que nunca se utiliza realmente el dinero en algo rentable, sino que solo se redistribuye de mano en mano, de la víctima al estafador. Actualmente, se volvió popular a través de un discurso feminista, con términos como "sororidad" y con la exclusividad en la que solo pueden entrar mujeres.

Varios organismos oficiales advirtieron ya que se trata de una estafa y que no es sostenible, por lo cual siempre alguien terminará perdiendo su dinero eventualmente.

La joven fue denunciada más de 300 veces y por más de siete millones de pesos.

En pocos meses, la joven llegó a recaudar $156.000, con los que logró alquilar un salón, acondicionarlo y comenzar a dar clases. Hasta llegó a comprarse un pequeño auto. En las reuniones, decía a los vecinos que había formado un fondo de reserva, para que nadie perdiera el dinero si el telar se rompía.

Al principio, por supuesto, hubo historias de éxito, pero después de pocos meses se derrumbó el esquema. Cuando alguien deja de sumar personas, el telar se trunca y aquellos que pusieron dinero quedan "atrapados" y sin posibilidad de recuperar su aporte.

Durante una mañana en mayo de 2016, un grupo de vecinos se juntó en la puerta de la casa de Julieta y comenzaron a apedrearla. Rompieron todos los vidrios y causaron destrozos. Tuvo que intervenir la policía. Otros damnificados intentaron prender fuego la casa con la chica y su familia adentro.

Incluso, durante esos días se presentó un hombre en la comisaría de la zona para denunciar que unos 10 vecinos se organizaban para secuestrar a la hermanita menor de Julieta, de tres años, para luego pedir de rescate la plata que habían invertido en el esquema piramidal. Por esa denuncia se inició una causa que quedó en la nada.

"Fue tanta la presión que en esos días intentó suicidarse dos veces. Primero tomando pastillas y luego tratando de ahorcarse", expresó el abogado de Ruiz.

En los registros se ven las hojas donde las personas que aportaban el dinero firmaban su consentimiento, de que cada uno le estaba entregando $18.000 a aquel que había subido al escalón más alto del telar.

A pesar de que todos, inclusive la Justicia, apuntaron contra Ruiz, en muchos de los casos ella funcionaba solo como organizadora y el dinero pasaba de manos de los nuevos integrantes a los que ya les tocaba cobrar. Luego de analizar los testimonios y las pruebas la Justicia ordenó la detención de la bailarina.

En las últimas semanas, en las redes sociales, la flor, el mandala o el telar de la abundancia fueron trending topic, incluso con actrices y cantantes famosas involucradas. Sin embargo, en la Fiscalía de Delitos Económicos no existen denuncias de estafas por este tipo. Ante esta situación de popularidad, desde la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), elaboraron una serie de recaudos para evitar ser víctima de una estafa piramidal, en la que "se invita al público a colocar su dinero con promesas de retribuirle intereses exorbitantes".

"Dado que el dinero ingresado no se destina a ninguna actividad que de por sí produzca utilidades, la posibilidad de obtener la ganancia prometida depende exclusivamente del ingreso de nuevos participantes. A medida que se van creando nuevos grupos, se van necesitando cada vez más personas para completarlos, lo que aumenta las posibilidades de que el mecanismo se quiebre y se produzcan pérdidas", explican los especialistas en estafas de la Procuraduría Nacional.

Fuente: Infobae