Autorizaron aumentos en los biocombustibles ¿vuelven a subir la nafta y el gasoil?

Un aumento del 2% en el precio de adquisición del biodiésel y de 8,34% en el precio del bioetanol elaborado a partir de maíz, que fue autorizado por el Gobierno a través de una Resolución publicada este jueves en el Boletín Oficial, podría impactar en los precios de las naftas y el gasoil. Sin embargo, el bioetanol elaborado a partir de caña de azúcar —otro de los biocombustibles— tuvo una leve baja de 3,2% (de $21,999 a $21,274).

Los biocombustibles son uno de los tres componentes que impactan en el precio final de las naftas y el gasoil en los surtidores de las estaciones de servicio. Los otros dos son el valor del dólar y el precio internacional del crudo Brent. Como estos dos últimos componentes vienen en baja —durante el mes de octubre, el dólar bajó un 12% y el Brent un 11%— todavía no está confirmado si el sector trasladará o no a los precios los aumentos del biodiésel y bioetanol.

"La nafta tiene un 12% y el diésel un 10% de biocombustibles. Evidentemente si aumentan deberían influir en el precio, en ese porcentaje que cada producto tiene de corte. Pero hay que ver qué decisión van a tomar las petroleras, si lo trasladan o no al precio final. Eso se verá el fin de semana", explicó Gabriel Bornoroni, presidente de la Federación de Expendedores de Combustibles y Afines del Centro de la República (Fecac).

En lo que va de 2018, los precios de las naftas y el gasoil subieron, en promedio, un 68%, con 14 subas en el año. El dólar, en tanto, se incrementó en más de 95%. Los últimos aumentos de los combustibles fueron a principios de noviembre, cuando Axion y Shell aumentaron sus productos (entre 3,6% y 7% según productos y marca). Luego le siguió los pasos YPF, pero con porcentajes más bajos, lo que obligó a sus competidoras a recortar sus subas unos pocos días después.

Pero la estabilidad del dólar y de los precios internacionales del petróleo no son las únicas variables que se deben tener en cuenta. En diciembre se incrementará nuevamente el impuesto a los combustibles —que reemplazó al ITC— que se determina de acuerdo a la inflación (IPC) relevada por el Indec durante el trimestre anterior.