El intendente de Esquel, Sergio Ongarato, junto al secretario de Gobierno de Trevelin, Alberto Cleri, y autoridades policiales, se reunieron hoy con el nuevo jefe de Gendarmería Nacional, Walter Prado. El tema fueron los controles de cara a los festejos de fin de año, teniendo en cuenta el importante aumento de casos de Covid en ambas localidades.
En este sentido, Ongarato aseguró que habrá más controles, aunque aclaró que lo fundamental es "la responsabilidad individual de cada uno en sostener las reglas básicas, higiene de manos, uso de tapabocas, distanciamiento social y todo lo que deriva como no compartir el mate, botellas, vasos o cubiertos". "Vieron la cantidad de casos que aparecieron en el Plan Detectar y seguramente hoy y mañana sean más. Preocupa porque lo que ha cambiado es que hay 5 personas en sala del hospital y 2 en terapia intensiva, no sé si con asistencia respiratoria o no", subrayó el mandatario.
"El hospital que es el último recurso que teníamos en la estrategia sanitaria ya está empezando a ser utilizado. Para que no colapse es necesario que los jóvenes que son los que más se contagian porque están teniendo más vida social, se cuiden y se reduzcan al mínimo posible los festejos de fin de año".
El intendente volvió a pedir especialmente a los jóvenes que respeten los cuidados: "Seguramente no les va a pasar más que el malestar o el dolor de cuerpo, pero el problema son los padres, las madres o los abuelos si los contagian. Apelamos a la conciencia social de todos".
Asimismo, marcó que hay una importante demora por la demanda entre que una persona da positivo y Salud avisa a los contactos: "Por la cantidad de casos que está habiendo, desde que una persona da positivo hasta que se notifica a todos sus contactos estrechos pasa una semana. En mi caso sucedió eso, yo estuve el 11 de diciembre en contacto con un empleado que dio positivo y me notificaron el día 18". "Si yo hubiera contraído el virus en ese tiempo podría haber estado contagiando", advirtió.
"Esto es parte de la responsabilidad social porque Salud está desbordada. Si uno tiene un síntoma tiene que llamar a un médico y si es positivo avisarle uno a cada uno de sus contactos".
"Yo le estoy pidiendo al ministro de Salud que atienda lo que está sucediendo en nuestra región porque es fundamental cuando aparece un caso positivo los contactos lo sepan y se aíslen. Si Salud no alcanza a avisar va a haber mucha gente contagiada", señaló Ongarato. "Hay muchos empleados estatales que no están trabajando y podrían hacer el seguimiento con una capacitación", planteó.
En este panorama preocupan las consecuencias de los festejos de fin de año: "Nosotros estamos previendo que si no cambiamos nuestro comportamiento para después de Año Nuevo, esto después de ir a los festejos en quinchos, casas o en el Parque Nacional y se hagan todos los festejos sin ningún cuidado nuestro hospital puede estar en problemas para atender a los que necesite atender". "Para que no colapse es responsabilidad de cada uno de nosotros", insistió.
"Va a haber más controles. Si en el Parque Nacional se hace algún festejo que sea en grupos pequeños, cerrados, que se conozcan entre todos ellos, y que no vuelva a suceder como en algunas chacras y casas de Esquel y Trevelin reuniones multitudinarias sin ningún cuidado", detalló la máxima autoridad del municipio. Destacó que "preferimos que estén habilitados los locales gastronómicos donde hay cuidado en mantener la distancia a que la gente se reúna en forma privada donde no hay control".