El 1° de enero a las 22:27 personal de la Comisaría Segunda fue alertado por parte del Centro de Monitoreo local (101) sobre una persona de sexo masculino que había recibido un disparo, presuntamente efectuado por un amigo. Rápidamente un móvil se dirigió al domicilio del barrio Sargento Cabral.
Cuando arribaron salió un menor de edad de adentro de la vivienda, quien presentaba manchas de sangre en toda su ropa. Se encontraba muy nervioso y pedía presencia de la ambulancia dado que su amigo se había herido con un aire comprimido en uno de sus ojos.
Los efectivos ingresaron a la casa donde en el living comedor encontraron a otro adolescente, de 14 años de edad, tendido en el suelo con su cabeza apoyada en una almohada y con gran pérdida de sangre proveniente de la zona ocular derecha.
Rápidamente, utilizando los medios de protección correspondientes (barbijo y guantes de látex) procedieron a tomarle el pulso radial, además de controlar la respiración y establecieron que no había anormalidades.
Luego se presentó una ambulancia del Hospital Zonal de Esquel. Médicos y empleados policial subieron al joven a la camilla inmovilizadora tras ser extraído por la ventana delantera del domicilio y luego ascendido a la ambulancia. Fue trasladado al nosocomio para que reciba la asistencia médica profesional.
Dieron intervención al funcionario de Fiscalía Carlos Cavallo, quien tras ser anoticiado de lo ocurrido dispone la intervención de Criminalística. Asimismo, ordenó que el testigo sea entrevistado con presencia de alguno de sus padres y se secuestren el alarma y los demás elementos que sean importantes en la investigación.
El herido se encuentra grave y en estado delicado a la espera de derivación de cuidados intensivos posiblemente a Trelew. Mientras tanto avanzan las investigaciones para tratar de determinar qué fue exactamente lo que sucedió.