La viralización del fallecimiento de Luisa Herrera, una anciana de Esquel, generó debate sobre la intervención estatal en la asistencia a personas mayores y la privacidad en la era digital.
La situación de la familia Herrera, que fue objeto de reiteradas intervenciones de asistencia social y sanitaria durante años. En conferencia de prensa, funcionarios municipales y personal del área de asistencia social brindaron detalles sobre la situación de la familia Herrera, conformada por cuatro adultos mayores que residen en una chacra. “Lamentablemente, estamos aquí para hablar de un fallecimiento que ocurrió hace una semana. La viralización del video relacionado con el caso ha sido dolorosa para todos nosotros, especialmente para la familia involucrada,” explicó el secretario de Desarrollo Social, Pablo Larregui.
La familia Herrera, que recibió asistencia tanto de la administración municipal como de PAMI y otras instituciones, fue objeto de varias intervenciones a lo largo de los años.
El fallecimiento de Luisa, quien había sido ingresada en un hogar de ancianos en el pasado, pero fue retirada por su hermana para vivir en su chacra, generó una controversia debido a la viralización del video que muestra el estado de la vivienda y de los residentes. “Es una desgracia que este tipo de situaciones se expongan públicamente de esta manera. Nuestra intervención con la familia ha sido constante y ha incluido desde la asistencia sanitaria hasta la provisión de cuidadores domiciliarios. Sin embargo, la voluntad de permanecer en su hogar ha complicado nuestras intervenciones,” comentó Larregui.
A pesar de los esfuerzos realizados, como la colocación de cuidadores y la asistencia continua, la familia mostró resistencia a abandonar su hogar y aceptar los servicios ofrecidos. Esta resistencia resultó un desafío para los trabajadores sociales, quienes intentaron equilibrar el respeto por la autonomía de los residentes con la necesidad de asegurar su bienestar.
La viralización del video puso en evidencia la delicada situación de la familia, generando un debate sobre el papel del Estado y el respeto a la privacidad de los individuos. Según Natalia Viana, Coordinadora Municipal de Adultos Mayores, a pesar del apoyo constante, fue complicado persuadir a la familia para aceptar la ayuda ofrecida. “Ellos tienen una forma y un estilo de vida que eligen tener, por más que nosotros quisiéramos que estuvieran mejor,” añadió.
La historia de Luisa y su familia refleja un problema recurrente en el ámbito del cuidado de adultos mayores. A pesar de los esfuerzos realizados, incluidos intentos de trasladar a Luisa a un hogar de cuidados y la provisión de cuidadoras domiciliarias, la familia prefería mantenerse en su hogar. “En el caso de Luisa, tratamos de ayudarla desde poniéndola en un hogar cuidadora y todo, pero ella y su familia querían permanecer en su casa,” detalló Viana.
La situación llegó a un punto crítico cuando Luisa falleció hace más de una semana. Viana se dirigió este lunes por la mañana a la casa de Celia, la hermana de la víctima, para ofrecer asistencia en la limpieza y reorganización del hogar. “Por primera vez nos dejó entrar y nos autorizó a que la ayudemos a limpiar su casa. Eso se hará mañana mismo,” indicó.
La Coordinadora también señaló que la familia Herrera recibió asistencia continua de diversas instituciones. “Manuel, otro de los hermanos, que vive en una casa tutelada, nos pidió que le acerquemos sus cosas. Esta familia está asistida hace mucho tiempo,” explicó Viana. Sin embargo, las intervenciones son complicadas por la resistencia de la familia a recibir ayuda externa y la interferencia de vecinos que dificultan la confianza y la cooperación.
“Tuvimos una conversación con el asesor Sánchez sobre la situación de la familia Herrera. Lo que sucede con esta familia es que ha tomado una relevancia innecesaria,” señaló Rocío Ferré, Subsecretaria de Coordinación. La funcionaria destacó que la visibilidad del caso no refleja la realidad de las numerosas intervenciones que fueron realizadas por los servicios sociales y el área de tercera edad.
Según Ferré, la familia Herrera recibió atención constante. “Luisa fue la primera mujer en ingresar al hogar Presidente Perón y fue retirada por su hermana,” explicó.
La Subsecretaria destacó que, a pesar de los esfuerzos por parte de las autoridades, la familia optó por no permitir la asistencia externa en su domicilio. “Nosotros hemos facilitado cuidadoras, pero ellos no permiten que ingresen a su domicilio,” agregó Ferré. El conflicto entre la intervención externa y el deseo de la familia de mantener su forma de vida es un desafío recurrente. según explicó la funcionaria.
Ferré también subrayó la importancia de proteger la privacidad de las personas involucradas. “Estamos tratando con la intimidad de las personas y debemos ser muy cautelosos al comunicar esto. Se hizo público de una manera lamentable, y es fundamental que resguardemos la privacidad de los vecinos,” dijo.
La funcionaria aseguró que el municipio tomará las medidas legales necesarias para proteger a la familia y garantizar que su privacidad sea respetada. “Vamos a tratar el asunto con nuestra asesora legal y, si es necesario, haremos las denuncias correspondientes,” afirmó Ferré.
O.P