Este martes comenzó en el Vaticano la primera congregación de cardenales luego del fallecimiento del papa Francisco, quien murió a los 88 años debido a un derrame cerebral. En el encuentro matutino, llevado a cabo en la capilla de Santa Marta, se establecieron tanto la fecha como el lugar del funeral. También se difundieron las primeras imágenes del pontífice en su féretro, dispuesto en dicha capilla.
Los cardenales decidieron que las exequias se celebrarán el sábado 26 de abril a las 10 de la mañana (5 de la madrugada en Argentina), en la Plaza San Pedro del Vaticano.
Por su parte, el traslado del cuerpo del papa está previsto para este miércoles a las 9 de la mañana. El féretro será llevado desde la capilla de Santa Marta hasta la Basílica de San Pedro, donde permanecerá durante tres días en capilla ardiente para que los fieles puedan despedirse y rendir homenaje.
El decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re, fue quien convocó oficialmente a todos los purpurados a través de una carta, una vez confirmada la noticia del fallecimiento. La primera congregación se realizó a las 9 de la mañana en el Aula del Sínodo, con la participación opcional de los cardenales mayores de 80 años, tal como lo establece la Constitución Apostólica en su punto número 7.
Durante la mañana, numerosos cardenales fueron vistos caminando hacia el lugar de la reunión atravesando la Plaza San Pedro. Mientras tanto, otros miembros del clero han comenzado a celebrar misas en memoria del pontífice en diferentes países.
La fecha del funeral fue elegida de acuerdo con los plazos fijados por la normativa vaticana, que estipula que la ceremonia debe tener lugar entre el viernes y el domingo posteriores al fallecimiento.
Además, el Vaticano confirmó que el protocolo funerario ha sido simplificado por deseo expreso del propio Francisco. Este lunes se realizó el rito de constatación de la muerte en su residencia, tras lo cual su cuerpo fue colocado en el ataúd para ser velado en la capilla de Santa Marta.
Como parte de las tradiciones funerarias del Vaticano, se procederá a la destrucción del Anillo del Pescador y de los sellos papales mediante una incisión, para impedir su uso tras la muerte del pontífice.
Fuente: Ámbito Financiero
C.S.