Las temperaturas ya empezaron a caer y, aunque todavía es otoño, las primeras heladas ya dicen presente en las frías mañanas de la cordillera. En este marco, se empiezan a escuchar conversaciones con distintas opciones sobre cómo descongelarlos de manera efectiva y segura, sin dañar los cristales ni las piezas del vehículo.
A continuación, compartimos algunas recomendaciones prácticas para enfrentar este fenómeno propio de los cambios de estación en la Patagonia cordillerana.
Cómo descongelar los vidrios del auto sin riesgos
Uno de los métodos más recomendados para remover la escarcha del parabrisas es rociar la superficie con alcohol, ya que su punto de congelación es mucho más bajo que el del agua. Esto lo convierte en una solución rápida y segura, ideal para capas finas de hielo. Eso sí: no se recomienda llenar con alcohol el depósito del limpiaparabrisas, porque puede dañarlo.
También es útil raspar el hielo con una rasqueta de plástico. En caso de no tener una a mano, podés usar una tarjeta plástica o incluso la caja de un CD. Evitá a toda costa los objetos metálicos o duros que puedan rayar el vidrio.
Otro consejo útil es arrancar el motor, encender la calefacción con el ventilador al máximo y dirigir el flujo de aire hacia el parabrisas. De esta manera, el calor irá ablandando el hielo de forma gradual y segura.
Qué no hacer para quitar la escarcha
Es importante evitar algunas acciones que pueden parecer lógicas pero son contraproducentes:
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No uses agua caliente. El cambio brusco de temperatura puede hacer que el vidrio se quiebre.
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No actives los limpiaparabrisas si el cristal está congelado. Las escobillas pueden romperse y dañar el motor del sistema.
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No apliques sal. Si bien evita que el agua se congele, puede rayar el cristal y corroer la chapa.
Prevenir es clave
Para evitar que se forme escarcha, podés cubrir el parabrisas con una manta o cartón durante la noche. También es útil tener líquido anticongelante en el depósito del limpiaparabrisas, especialmente en zonas donde las heladas son frecuentes.
Aunque aún no empezó el invierno, el otoño ya trae sus primeros síntomas. Con estas simples recomendaciones, podés cuidar tu vehículo y evitar complicaciones en los arranques de la mañana.
O.P