La impunidad: el desencanto social

Entre las grandes esperanzas de la mayoría de los argentinos al ganar las elecciones Cambiemos, estaba su promesa de ser implacables con la corrupción: de ninguna manera tendría lugar en el macrismo y se haría justicia ante los hechos que iban saliendo a la luz y que comprometían a gran parte de la dirigencia kirchnerista.

A la fecha, no solo se ha armado un circo en torno a los hechos pasados de corrupción La danza de imputados por supuestos delitos son muchos y los que presentan un proceso firme ante la justicia pocos. El caso de la ex presidenta se saca de la galera cada vez que el gobierno está en aprietos.

Al enojo por lo robado al estado se suma la impotencia que genera la posibilidad de la impunidad y que entre políticos, todo se arregle.

Recordemos el caso de la valija de Antonini Wilson empresario venezolano detenido tras intentar ingresar 800.000 dólares -en el año 2007- sin declarar al país. El hecho destapó los negociados de los Kirchner con el gobierno de Hugo Chávez.

Días atrás se supo que el caso prescribió, aunque se había probado que el dinero era para el gobierno que por entonces estaba en campaña para la elección de Cristina como presidente.

Lo que sucedido con este caso puede volver a ocurrir si las causas de corrupción siguen su curso mediático y su lentitud en la justicia.

Es aún más decepcionante que el actual gobierno no está libre de pecado;  las empresas offshore que en otros países -al conocer de su existencia-  han llevado a varios políticos a renunciar y terminar con su carrera, en Argentina no han tenido la investigación adecuada y por ahora los involucrados en estas  sociedades creadas en paraísos fiscales, siguen en la política sin mayores consecuencias.

Si bien tener una empresa offshore no es ilegal, si puede serlo si el beneficiario no declara su participación ante la autoridad tributaria. La lista de Cambiemos vinculado a estas sociedades no es menor, involucra a propio presidente, a Juan José Aranguren; Luis Caputo; a los  intendentes de Cambiemos en Lanús, Néstor Grindetti y de Vicente López Jorge Macri. También figura Claudio Avruj, secretario de Derechos Humanos y el subsecretario general de Presidencia, Valentín Díaz Gilligan.

Este viernes, finalmente, Mario Quintana, secretario de Coordinación Interministerial y accionista de Farmacity fue imputado- entre otros delitos que se investigan-por querer favorecer a esa empresa como proveedora del PAMI.

La inflación, la inseguridad, la pobreza y la falta de trabajo ocupan  las preocupaciones de millones de argentinos, tanto, que la corrupción del anterior gobierno ha pasado a un segundo plano, más aun corroborando que fue usada en la campaña para juntar votos con la promesa de justicia para los corruptos y devolución de lo robado, que luego de asumir el mandato del “cambio”, nada ha sucedido hasta la fecha, todo lo contrario, con dos años en el poder tampoco el macrismo es “trigo limpio”.

En nuestro país, mientras se está en el poder raramente se juzga a quien lo ejerza, sucedió con el gobierno anterior y sucede con el actual. Toda posible acción judicial comienza luego del mandato y por lo general queda en la nada, peor aún, con acusaciones, imputaciones, etc son muchos los que continúan viviendo de la política.

En la provincia

Chubut no es ajeno a estos hechos, hoy consternados  hemos visto al dasnevismo pasar de ser calificado como el mejor gobierno de la provincia, al de la matriz más corrupta de todos. Lo peor es que se repite lo mismo que en la nación: ya no está Das Neves para que explique nada y cómo se perfilan los hechos en los últimos días, todo parece indicar que la defensa de los imputados más comprometidos apuntará a que cumplían órdenes del exmandatario.

La situación de la provincia hoy es precaria, con un horizonte poco definido donde no aparecen las soluciones, solo pasan los días y los conflictos se agravan.

Los analistas económicos auguran –para el resto del año- meses muy difíciles para todo el país, en Chubut, tal como están muchas áreas -algunas imprescindibles como educación y salud- el panorama es aún más complejo. Con Arcioni parece no poder resolverse los conflictos pero no se vislumbra ninguna otra opción desde lo político, no hay partido ni figura que despunte como posible atenuante ante la crisis; de ahí que lo sensato sería que prevalezca la gobernabilidad y que alguna vez, sin miserias, se piense en la provincia y en la política como herramienta única, capaz de hacer que prevalezca la paz social.

CHISTECITO DE YAPA

El ministro de defensa de Andorra decide declararle la guerra a los Estados Unidos.
La noticia llega a oídos del presidente de los EE.UU., quien inmediatamente se reúne con su secretario de defensa, y le pide que viaje con urgencia a Andorra para intentar evitar las hostilidades.
El secretario así lo hace: nada más llegar a Andorra, va a ver al ministro de defensa y le intenta hacer entrar en razón.
–Pero, hombre, ¿cómo se le ocurre a usted declararle la guerra a los EE.UU. de América? ¿Es que no sabe que tenemos más de cien flotas repartidas por todo el mundo?
–¿Cien flotas? ¡Ja! Pues no sé qué van a hacer cien flotas aquí en Andorra…
–¡Pues que sepa que en cualquier momento podemos traer a mil cazabombarderos y arrasar con todo!
–¿Mil cazabombarderos? ¡Puaf! Nosotros tenemos una avioneta de fumigar, y con eso nos sobra.
–¡Pues debería saber que tenemos un ejército de cinco millones de soldados listos para el combate!
–¿Cinco millones, dice? Vaya, pues entonces no hay guerra.
–Ehhh… ¿No? ¿Y ese cambio de idea?
–Verá, es que Andorra es muy pequeña y ¡no tenemos sitio para tantos prisioneros!