El Molino Andes cumple 100 años

El 19 de marzo uno de los edificios históricos más importantes de Trevelin cumple 100 años; el Molino Andes, el edificio que proveyó de harina a toda la región, que le dio el nombre a la Colonia 16 de Octubre y que actualmente alberga importantes objetos de la historia del pueblo.

El Molino Andes fue fundado por Jhon Daniel Evans, ante la inminente necesidad de contar con una forma industrial que brinde una solución a la molienda de trigo para producir harina y de esa forma proveer del alimento a toda la región.

Si bien, la construcción completa del edificio llevó más de cuatro años, este comenzó a funcionar como un centro de atención, de reuniones, un lugar de toma de decisiones, donde surgió la posibilidad no solo de proveer de harinas al pueblo y los pueblos vecinos, sino que allí también se decidió formar en 1926 una central para dotar de electricidad al edificio y al caserío cercano.

Con el paso de los años, se consolidó la producción triguera del valle y con ella la molienda. En 1914 John D. Evans y Coslett Thomas trabajaron en sociedad y acopiaron el trigo sembrado en todo el lugar.

Al transcurrir el tiempo surgieron diferentes inconvenientes hasta que, en octubre de 1958, a treinta años de haberse creado la Sociedad del Molino Andes, la asamblea de socios determinó la venta de la Maquinaria a Molinos Concepción de Bahía Blanca.

En 1972 un incendio destruyó el interior del edificio reduciendo a cenizas toda la madera de pisos y techados, lo que motivo a los vecinos a crear el cuartel de bomberos en el año 1976 dependiendo de la Policía de la Provincia.

El edifico permaneció en ruinas hasta que, en 1985, con el intendente Atuel Williams, se logró su recuperación. Se lo dotó de pisos de concreto, escaleras y albergó diferentes áreas municipales hasta que se destinó por completo al Museo Regional Trevelin.

Tras años de prosperidad, y luego de efectuarse cientos de reparaciones, el Molino Andes celebrará el 19 de marzo el centenario de su inauguración. Con su esplendor recuperado, sus fachadas reparadas y atesorando importantes objetos, guarda la historia y la nostalgia de quienes trabajaron en el emblemático edificio.