Amenaza narco: presos en la cárcel de Chubut amenazan a jueces fiscales de Santa Fe

Un juez, un fiscal, un senador provincial y un intendente recibieron amenazas de un narco en Venado Tuerto, Santa Fe. El mensaje advertía que iban a ser atacados con “balas y granadas” junto a una alerta “El que avisa no traiciona” y una lista de funcionarios judiciales y políticos. 

Se cree que las amenazas serían de Nahuel Novelino quien suma cinco causas por narcotráfico, en las que amenaza al senador provincial Lisandro Enrico y al intendente de la localidad, Leonal Chiarella. A diferencia de las anteriores intimidaciones, esta incluye un lista más amplia en donde están el fiscal federal Arzubi Calvo y el juez Cuello Murúa.

A causa de esto, se reforzaron la custodia de los integrantes de la lista. En los mensajes también se enviaron fotos de un arma, una Bersa TPR 9 junto a la frase “Esta es para ustedes”.

Novelino está preso pero al ser un narco pesado descubrieron que aún seguía operando desde los penales, entonces comenzó a rotar por distintas cárceles primero de Santa Fé, después Chubut y ahora en la provincia de Buenos Aires. 

Su sede de operaciones era Venado Tuerto, allí era uno de los referentes de la venta de droga y donde intentó incendiar la sede de la fiscalía. 

La historia criminal de Novelino tiene varios capítulos. Su base era Venado Tuerto, donde era uno de los referentes de la venta de drogas. Se lo recuerda allí como un joven que usaba la violencia extrema para imponer su negocio. El fiscal Arzubi Calvo sigue los pasos del narco desde hace tiempo. Novelino intentó, incluso, incendiar la sede de la fiscalía en esa localidad. 

Al ser trasladado a la cárcel de Resistencia, se descubrió el plan para atentar contra la casa del intendente de Venado Tuerto. Novelino fue detenido por primera vez en 2016 cuando tenía 33 años, desde la cárcel fue realizando su carrera delictiva. 

En la cárcel de Piñero conoció a Lucía Uberti de la banda de Los Monos, quien estaba alojada en el penal de mujeres. Se conocieron por teléfono y comenzaron una relación sentimental, desde allí planeaban y controlaban sus negocios como una tienda de ropa en Rosario, donde se acercaban a pagar los clientes que compraban drogas.