Hoy por la mañana se realizó un allanamiento por parte del Ministerio Público Fiscal y la División de Investigaciones de la Policía del Chubut en un domicilio de la calle Avellaneda al 1600 en Esquel por una causa de abuso sexual.
El hombre en cuestión, tenía prohibición de acercamiento y de contacto y la incumplió al mandarle mensajes telefónicos a la víctima.
"Tuvimos una denuncia de una violencia sexual que se está investigando. Esto generó una prohibición de acercamiento. El allanamiento se hace porque el sujeto no la respetó. Se pidió una serie de medidas al juez porque envió unos audios y estamos verificando para pedir urgente una apertura de la investigación y una condena rápida", expresó desde el lugar de los hechos el fiscal Dr. Carlos Richeri.
El fiscal agregó que: "La desobediencia es el delito más importante. En el caso de que una persona, en un contexto de violencia de género, es buscar una sanción procesal. Si la prohibición no funcionó, buscar una sanción más grave y el castigo".
Respecto al vínculo entre las personas, indicó: "Es el padre. Al tratarse del tipo de caso, no puedo brindar más información, pero había un parentesco. Estamos buscando el dispositivo desde el que se envió el mensaje para probarle al juez que el que envió el audio fue él, sabiendo que tenía prohibido contactar a la persona pero igual lo hizo".
"Tenemos detalles de estos mensajes que los estamos analizando. No podemos dar características. Lo importante es que tenía prohibido contactarla pero igual lo hizo".
"El secuestro está vinculado a un caso de desobediencia. El abuso lo estamos investigando y venimos trabajando rápido", agregó Richeri.
En cuanto al pedido de detención comentó que: "Oportunamente pedimos una detención, pero el Ministerio Púbico Fiscal no reunió los elementos. El juez resolvió rechazarla y sí nos concedió la oportunidad de hacer el secuestro del celular".
Por último, sobre la posible condena puntualizó: "La desobediencia tiene una pena muy baja, de 15 días a 1 año. Pero es importante una sanción rápida. Por más que se lo condene por seis meses, esa persona una vez que está condenada y vio respuesta de la justicia no repite. Ocho de cada diez personas no repiten. Si no actuamos rápido, no se sanciona rápido y la persona piensa que está todo bien y vuelve a desobedecer sin problema. Vamos a tratar de conseguir una condena rápida".