La Dra. María Bottini, fiscal jefe del Ministerio Público Fiscal de Esquel, está llevando adelante la investigación por la herida con arma de fuego contra un joven de 20 años en el barrio Badén II. Comentó que evalúan pedir la prisión preventiva ya que hay temor por parte de testigos.
"La audiencia va a ser hoy a la tarde. Están dos personas detenidas. Lo que sucedió fue ayer, un joven salía de su domicilio con una amiga y se encuentran con una de estas personas que se acerca y los amenaza de muerte primero. Después intentan volver al domicilio y previo a ello, la persona le efectúa 5 disparos y uno de ellos impacta sobre el joven que está herido. Las heridas de bala es la gravedad a determinar, pero está fuera de peligro", dijó Bottini al relatar el comienzo del hecho.
Agregó que: "Luego, con el joven herido ingresan al domicilio y quienes ya habían disparado, junto con su hermano, dispararon contra la vivienda. Eso lo pudo constatar Criminalística. Se dispone la medida de detención de ambas personas que fue ordenado por el Dr. Criado, el juez que está de turno".
Asimismo, la fiscal detalló que: "Se van a pedir medidas cautelares. Todavía no evaluamos el tiempo, pero los hechos son suficientemente graves. También son personas con antecedentes, uno de ellos tiene condena en suspenso por un hecho similar con arma de fuego y el otro tiene suspensiones de juicio a prueba con hechos de violencia. Esto tiene que ser evaluada para ver la situación procesal, si van a continuar detenido o no. Fiscalía hará el pedido y después el juez resolverá".
Por otra parte, comentó sobre el fin de las medidas cautelares y manifestó que hay testigos que están atemorizados: "El fin de las medidas cautelares no es solo resguardar a las víctimas, pero la preocupación está. Estuvo el padre del joven lesionado hablando con nosotros y nos da cuenta de esta preocupación porque no es la primera vez que uno de sus hijos sufre ataques con armas de fuego por parte de estos hermanos. Además, las personas que son testigos no se animan a declarar porque les tienen miedo. También tienen el fin de proteger el proceso, que pueda llegar a buen puerto a juicio, condena, que la gente no tenga miedo de declarar. Eso se tiene en cuenta al momento de pedir que queden detenidos porque si en libertad están agrediendo a los testigos, va a frustrar el juicio y no se van a animar a declarar. La fiscalía lo va a plantear".
Además del delito por amenazas y agresiones, uso de arma de fuego, también existió la desobediencia: "Hay una prohibición de acercamiento, por lo cual se configura el delito de desobediencia. Se agrava la situación porque no cumplieron con esa orden que era para evitar las agresiones entre ellos", concluyó Bottini.