Damián Villanueva, referente de la agencia Dv Turismo Patagonia, reflexionó sobre la dinámica turística en Esquel, con especial énfasis en el Centro de Esquí La Hoya.
Villanueva remarcó que su agencia es relativamente nueva: “hace dos años que estamos comercializando Esquel”, y trabajan durante todo el año, buscando “unificar y realizar diferentes paquetes que la gente les parezcan interesantes para poder venir al destino”. Según dijo, la temporada de verano y la de tulipanes fueron “muy buenas” en ambos años, y aspiran a continuar esa tendencia.
Sin embargo, desde hace “4 o 5 temporadas atrás” detectan una baja sostenida de visitantes en invierno: “hemos notado un descenso importante en cuanto a la cantidad de visitantes y a la cantidad de turistas que vienen al cerro”. Ante ocupaciones en temporada alta de apenas entre el 15 y 30 %, lo calificó como “un fracaso”.
Reconoció que los actuales concesionarios de La Hoya han realizado inversiones en la confitería y los medios de elevación, y valoró la buena predisposición del personal. Pero sostuvo que existe una “deficiencia clara en la comercialización”. El mercado de invierno está sufriendo por esa falta de estrategia conjunta de Estado y sector privado: “tener índices de ocupación en temporada alta de invierno del 15, 20, 30 %… es un fracaso, entonces creemos que el tema de la comercialización es un tema central a definir”.
Villanueva puso como ejemplo positivo la temporada de tulipanes: “tienen un objetivo claro, saben hacia dónde apuntan y van año a año tratando de mejorar en conjunto con los privados con el Estado.” En cambio, en invierno “no hay comunión ni un punto de encuentro en cuanto a la planificación estratégica del destino”.
Respecto a los vuelos –con importancia como el nuevo enlace a Córdoba– exhortó: “el cerro tiene que estar trabajando claramente en promocionar esos vuelos y claramente en tener muchos más esquiadores de los que tenía habitualmente”. “Tenemos un público como el de Córdoba… tenemos que promocionarlo de manera conjunta y una promoción agresiva para poder completar esos vuelos.”
Sobre tarifas de pases y clases destacó la tardanza: “necesitamos tener los valores (…) por lo menos cuatro o cinco meses antes para poder comercializarlas, y no es posible vender el destino a 15 días de la apertura del cerro.” Agregó que “el producto nieve necesita un tiempo para poder venderse”, y lamentó que “no tener las tarifas […] con anterioridad dificulta la comercialización de nuestro negocio”.
Al analizar la gestión, Villanueva señaló que la transición de concesión pública a privada cambió la dinámica: “es lógico, pero entendemos que los recursos son de todos”. Considera que las políticas de tarifas –como las para residentes provinciales– deben estar alineadas con “la planificación estratégica del destino”.
Resaltó que “los prestadores turísticos en Esquel han invertido mucho (…) se han agregado muchos servicios y productos turísticos”. La temporada de tulipanes “es un alivio sobre todo para lo que es la mala temporada que ha sido en invierno; es un aliciente (…) pero no alcanza teniendo el recurso que tenemos en invierno”.
Finalmente destaco su propuesta: “definir políticas de largo plazo… si todos los prestadores con el sector público logran llegar a un acuerdo y tener un objetivo claro en común, vamos a estar dando pasos importantes para el destino.”
F.P