Vuelven Los Simuladores

Ayer Paramount Studios anunció el regreso más esperado por la mayoría de los argentinos: Los Simuladores. Este cuarteto dedicado al negocio de la simulación vuelve en forma de película y en el 2024. La mayoría de los fans estamos saltando de la emoción y la ansiedad. Algunos fundamentalistas se niegan a creer que su regreso pueda ser igual de delicioso, muchos esgrimen la idea de que su argumento solo funciona en la argentina de la post convertibilidad. Yo prefiero dar un salto de fe y esperar a ver la realización para poder amarla u odiarla.

Si todavía no viste la serie, te comparto algunas razones por las que deberías verla o volver a verla mientras esperamos la llegada de la peli.

No solo cada capítulo es completamente atrapante, sino que además te van a dejar pensando. La serie tiene la dosis perfecta de crítica y thriller. En cada episodio aparecen situaciones hilarantes y muchas veces los simulacros de estos hombres suelen dejar expuestos a distintas autoridades: policías, gobiernos, fuerzas armadas y bancos son solo algunos de los entes que son ridiculizados por estos hombres.

Sus diálogos tienen una precisión de quirófano: uno de los talentos de esta producción es la calidad de sus diálogos

Tiene a los tanques de la actuación argentina: podríamos decir que el plantel estable de la serie -los cuatro protagonistas- son impecables: Diego Peretti, Federico D’elia, Alejandro Fiore y Martin Seefeld. Y si, es correcto, son impecables. Pero, además, en 22 episodios que duró la serie pasaron bocha de grandes actores argentinos. Entre ellos: Veronica Llinas, Cluadio Rissi, Alejandro Awada, Luis Luque.

Capta al 100x100 la esencia argentina de tener que hacer todo por izquierda: ellos vienen a generar simulacros -siempre dentro de lo legal- para resolver problemas con el espíritu de ayudar a los otros. Y creo, que por eso fue que los amamos tanto. Los Simuladores fueron los superhéroes versión argenta que necesitábamos en el post 2001.