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29 de Agosto de 2022
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Juan Bautista Alberdi: frases sobre la libertad, el gobierno y la riqueza

Las ideas de este gran pensador argentino continúan vigentes hasta hoy, y, cada 29 de agosto, se celebra el Día del Abogado en su honor.

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Como cada 29 de agosto en nuestro país se celebra el Día del Abogado. Esta fecha se eligió para conmemorar el natalicio de Juan Bautista Alberdi, quien nació en Tucumán en 1810. Este letrado, jurista, economista, diputado, escritor y músico, fue uno de los autores intelectuales de la Constitución Argentina de 1853.

 

 

Alberdi fue uno de los grandes pensadores argentinos, defensor acérrimo de la libertad y de los tres pilares para el éxito de una República: seguridad jurídica, confianza económica y estabilidad política.

 

 

Con opiniones que siguen vigentes hasta hoy y algunas polémicas, Alberdi dejó frases que son completamente relevantes en nuestra sociedad actual. Compartimos algunas:

 

 

 

 

-Los clamores cotidianos de la tiranía no podrán contra los progresos fatales de la libertad

 

 

-La omnipotencia del Estado es la negación de la libertad individual.

 

 

-La democracia es la libertad constituida en gobierno, pues el verdadero gobierno no es más ni menos que la libertad organizada.

 

 

-El impuesto aduanero es un gravamen a la civilización.

 

 

-Las sociedades que esperan su felicidad de la mano de sus gobiernos, esperan una cosa que es contraria a la naturaleza.

 

 

-Es un déspota todo aquel que cree que ser opositor al Gobierno es ser traidor a la patria.

 

 

-Dad al poder ejecutivo todo el poder posible, pero dádselo por medio de una constitución. Lo peor del despotismo no es su dureza, sino su inconsecuencia, y sólo la Constitución es inmutable.

 

 

-Recordemos a nuestro pueblo que la patria no es el suelo. Tenemos suelo hace tres siglos, y sólo tenemos patria desde 1810. La patria es la libertad, es el orden, la riqueza, la civilización organizados en el suelo nativo, bajo su enseña y en su nombre.

 

 

-¿Qué exige la riqueza de parte de la ley para producirse y crearse? Lo que Diógenes exigía de Alejandro: que no le haga sombra.

 

 

-En efecto, ¿quién hace la riqueza? ¿Es la riqueza obra del gobierno? ¿Se decreta la riqueza? El gobierno tiene el poder de estorbar o ayudar a su producción, pero no es obra suya la creación de la riqueza.

 

 

-El Gobierno es una necesidad de civilización, porque es instituido para dar a cada gobernado la seguridad de su vida y de su propiedad. Esta seguridad se llama y es la libertad.

 

 

-El gobierno no ha sido creado para hacer ganancias, sino para hacer justicia; no ha sido creado para hacerse rico, sino para ser el guardián y centinela de los derechos del hombre, el primero de los cuales es el derecho al trabajo, o bien sea la libertad de industria.

 

 

-En este sentido, la libertad no es ni más ni menos que el gobierno expedito de sí mismo. Ser libre, es gobernarse a sí propio. La libertad es el mejor de los gobiernos, por esta razón palpable y natural: que como nadie es más amigo de sí mismo que uno mismo, nadie es mejor juez ni más fiel administrador de lo que interesa a su propia existencia que uno mismo.

 

 

-La dificultad no consiste en saber cómo pagar la deuda, sino en cómo hacer para no aumentarla.

 

 

-La ignorancia no discierne: busca un tribuno y toma un tirano. La miseria no delibera, se vende. Alejar el sufragio de manos de la ignorancia y de la indigencia es asegurar la pureza y acierto de su ejercicio. Algunos dirán que es antidemocrático pero la democracia, tal como ha sido ejercida hasta ahora, nos ha llevado a este triste destino.

 

 

-El que no cree en la libertad como fuente de riqueza, ni merece ser libre, ni sabe ser rico. La Constitución que se han dado los pueblos argentinos es un criadero de oro y plata. Cada libertad es una bocamina, cada garantía es un venero. Estas son figuras de retórica para el vulgo, pero es geometría práctica para hombres como Adam Smith.

 

 

-Llevad con orgullo, argentinos, vuestra pobreza de un día; llevadla con esa satisfacción del minero que se para andrajoso y altivo sobre sus palacios de plata sepultados en la montaña, porque sabe que sus harapos de hoy serán reemplazados mañana por las telas de Cachemira y de Sedán.

 

 

-La Constitución es un título de propiedad que os llama al goce de una opulencia de mañana. El que no sabe ser pobre a su tiempo, no sabe ser libre, porque no sabe ser rico.

 

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