Saldos y retazos del boxeo en Esquel

Casi dos años pasaron del último festival de boxeo amateur en el Gimnasio Municipal de Esquel. Y para este año se informó de un festival internacional para mediados de agosto.

La nueva Comisión de Boxeo Municipal, al mando de Manuel “el Gallo” Prieto y con veinte colaboradores, se pusieron el overol encima y demostraron que se puede armar un lindo festival y con mucha gente en las tribunas.

El viernes por la noche el gimnasio municipal se vistió de fiesta, a pesar de la intensa lluvia que cayó en esos momentos.

Como dato a destacar, las dos primeras peleas, fueron arbitradas por Mónica Lino, quien hizo su debut dentro del arbitraje de boxeo amateur.

Precisamente en la primera pelea, de un total de ocho, fue la más sangrienta y emotiva de todas. Brian Lienllán, de la ciudad de Esquel, superó por puntos en fallo dividido al trevelinense Lucas Villarroel, pupilo del profesor Jorge Aliberti.

La cara de ambos pugilistas fueron la muestra cabal del espectáculo que brindaron donde el rojo de la sangre fue el predominio en los guantes de cada uno.

Claro que Trevelin tuvo su revancha en la pelea siguiente. También en fallo dividido, Nicolás Orias derrotó a Diego García; en tanto Gabriel Rozas fue muy superior a Leandro Colemil al que lo derrotó por puntos en fallo unánime.

La polémica de la noche se produjo en la cuarta pelea, donde Claudio Mariluan de la localidad de El Hoyo derrotó a José “Petaca” Pérez, de Gobernador Costa,  pupilo de Carlos “el Cholo” Julián.

Sobre la nariz de “Petaca” Pérez brotaba demasiada sangre, pero en ningún momento el boxeador dejó de reaccionar. Estaba con todos los sentidos bien puesto sobre su rival y hasta nos animaríamos a decir que la victoria, hasta el momento, estaba de su lado.

Primero subió la enfermera y le dio a “Petaca” el pase para seguir la pelea, pero al rato, por decisión de Raúl Martínez cortó la misma, pensando más en la salud del joven y abriendo la posibilidad de una revancha.

Luego llegó el turno de las chicas, con la salvedad que debía haber llegado a Esquel la joven Dahiana Gallardo, de Bariloche, pero al no llegar el entrenador Kote Raijko presentó en el ring a la joven Bárbara Puelman que hizo lo que pudo ante Glenda Higueras, quien le ganó por puntos.

Luego lo escrito anteriormente en otros artículos, la inmensa superioridad de Joel Díaz, el regreso de Ángel “Panchito” López y una nueva victoria de Walter “el Cacique” Nahuelpan, para creer que el boxeo en Esquel sigue vivo.