Los directivos de las escuelas secundarias 701, 713, 735, 758, 767, 791, 7708, 7722 y 7730 firmaron un documento en que advierten una serie de complicaciones que se han agravado en el contexto de aislamiento y que es necesario solucionar para pensar en un regreso a clases. El punto fundamental que consideran es la deuda salarial, ya que no poder contar con todo el personal por las medidas de fuerza dificulta la adaptación a un nuevo esquema de trabajo.
"Estamos muy preocupados por la situación de nuestras comunidades educativas, de las instituciones que conducimos. Estuvimos trabajando junto con los supervisores y el equipo de orientación a las trayectorias escolares para analizar cómo nos encontramos", señaló al respecto Corina Milán, directora de la escuela N° 7722. "Es el tercer año que tenemos discontinuidad de clases y no podemos trabajar como merecemos todos. Este año tenemos la crisis provincial, la enorme deuda salarial que habilita medidas de fuerza permanentes y la desinversión en el mantenimiento de los establecimientos que tiene su impacto", agregó.
Consideró que la pandemia "nos tomó en el peor de los contextos": "Usualmente hay problemas en las escuelas que llevan a suspensiones o a conflictos, todo ese combo con el que venimos se volvió una situación crítica y muy grave". "Hubo que reconvertir las prácticas y tratar con mucha precariedad de generar dispositivos a distancia para los que no estábamos preparados. Ni siquiera habíamos tenido la posibilidad de cerrar debidamente el ciclo 2019 y comenzar el 2020, los docentes no llegaron a conocer a los grupos, no se llegaron a iniciar las clases", graficó. "Tuvimos que aprender a usar mecanismos que no sabíamos usar y mientras tanto siguen las medidas de fuerza, que quizás quedan un poco invisibilizadas por el aislamiento, pero hay un número muy alto de trabajadores de educación adheridos", prosiguió Milán.
En este contexto, a pesar de articular mecanismos dentro de lo posible para acompañar a los estudiantes, "sabemos que es muy deficiente lo que hemos podido brindar en términos pedagógicos. En nuestra región no tuvimos buenos resultados". "Más allá de las particularidades de cada escuela, los problemas en general los compartimos. Nos preocupa y nos angustia. Somos las caras visibles y los referentes de las instituciones ante la comunidad, por eso debemos elevar los reclamos que corresponden. Muchos son antiguos y hay otros que la coyuntura actual nos plantea", especificó la máxima autoridad del colegio 7722.
"Nos damos cuenta de que tenemos que repensar toda la propuesta pedagógica", subrayó Milán y afirmó que han elevado reclamos al Ministerio de Educación, además de comenzar a trabajar en la búsqueda de alternativas. Sin embargo, advirtió: "Debe resolverse el conflicto salarial, que en estos últimos 3 años se agravó. Hay una deuda muy importante con los trabajadores de la educación, se entiende que mucha gente se enoja con los docentes y habla de la vocación, pero está afectada la subsistencia de gran parte de los trabajadores".
También indicó que "debe invertirse lo que corresponde y dotar de recursos a las escuelas para que estén en pleno funcionamiento". "Ya podemos imaginarnos leyendo lo que produjo el Consejo Federal de Educación que hacen falta recursos, insumos, capacitaciones y va a tener un cambio muy importante la forma de trabajar en las escuelas. Eso es impensado en estas condiciones en las que estamos", insistió. "Tenemos voluntad, deseo y una enorme necesidad de volver a trabajar plenamente en las escuelas. En este contexto tenemos complejidades extras y un desafío gigante, pero es indispensable para poder avanzar que el gobierno garantice las condiciones para trabajar plenamente", manifestó la docente.
"Debemos tener los tanques de agua limpios, los problemas de infraestructura resueltos, va a haber que repensar la arquitectura escolar porque los grupos van a tener que ser reducidos. Es complejo para las escuelas en las que faltan aulas".
"Necesitamos tener a todo el personal trabajando y hasta deberíamos reforzarlo porque va a haber que hacer un acompañamiento mucho más cercano de cada estudiante", continuó, haciendo hincapié en que es fundamental que se regularice el pago de sueldos. "Nos preocupa este silencio y esta falta de soluciones", destacó.
El documento:
LA SITUACIÓN DE LA ESCUELA 7722
En el caso puntual de la escuela 7722, Corina Milán expuso: "Hay que hacer una limpieza de los tanques de agua. Tenemos un análisis bromatológico que dice que no es apta el agua del baño de estudiantes. La limpieza entre medidas de fuerza y aislamiento quedó sin hacer". También es necesario revisar la estructura edilicia: "Es un terreno que se mueve mucho, trabaja mucho, está muy agrietado y hay que analizar la estructura. Hay que hacer un chequeo eléctrico y cambiar muchas luces. Se debe hacer un trabajo con cloacas y pluviales. Se desbordan las cloacas y cada vez que llueve la escuela se inunda. Son trabajos posibles, estoy agradecida a los trabajadores de obras públicas pero les pasa lo mismo que a todos los trabajadores de la provincia, les faltan recursos y gente". "Cada escuela tiene lo suyo y todos necesitamos distintas respuestas", cerró.