04 de Noviembre de 2022
opinion |
Carlos "El Chavo" Ortíz

Elijo no cubrir la velada de Guanteo Infanto Juvenil que se hará en el Grupo Joven Ceferino

Un redactor de este medio señala los motivos de porque no estará presente mañana

Escuchar esta nota

No es fácil tomar esta determinación. Pero al día de hoy todavía me hace ruido la panza. Por ende me parece más sano no cubrir como periodista deportivo un encuentro social, inclusivo para los niños y jóvenes, que tendrá lugar mañana sábado en la cancha de tierra del Grupo Joven Ceferino. En ese lugar habrá un encuentro de guanteo, una especie de exhibición de boxeo infanto juvenil.

 

No puede ser todo lo mismo. No es lo mismo, portarse bien que portarse mal. No es lo mismo estudiar para un examen que copiarse y sacarse un 10. Eso lo tengo muy claro.

 

No es lo mismo entrenar todos los días para ser titular en el partido del domingo o que venga el técnico y convoque a uno que nunca a va entrenar y tiene privilegios.

 

No es lo mismo abrazar a un abuelo o despreciarlo por ser viejo. No puede ser todo lo mismo.

 

No es lo mismo ayudar a un compañero de la escuela con alguna material en la que ande flojo, a armar un grupo de wasap y hacerle bulling entre todos. No es lo mismo, no puede ser todo lo mismo.

 

Yo elijo portarme bien (o intento portarme bien), es una elección de vida. Tengo dos hijos (un niño y una preadolescente) y trato, con muchos errores, de acompañarlos en el crecimiento con cierta libertad que puede dar un padre en estos tiempos por demás difíciles.

 

No quiero usar esta columna para dar lecciones de moral y buenas costumbre. De hecho no orino agua bendita y seguramente cometo muchos errores como los puede cometer cualquiera. Nadie está exento. Somos seres humanos.

 

Pero tengo la posibilidad de distinguir entre lo bueno y lo malo, entre el respeto por el otro y el desprecio por la vida. Puedo distinguir entre ganar con armas leales o ganar usando todo tipo de artimañas.

 

No puede ser lo mismo robar para darle de comer a los hijos, que trabajar 12 horas para el mismo fin. No puede ser lo mismo robar un celular que hacer el esfuerzo necesario para comprarlo.

 

No se puede ser lo mismo matar de manera accidental que hacerlo con toda la saña posible.

 

No puede ser lo mismo abrazar a una hija o violarla reiteradamente.

 

No puede ser lo mismo, defender una familia que destruirla.

 

La justicia lo condenó por un hecho aberrante, de lo más bajo que pueda caer un ser humano. La justicia le hizo pagar una pena. Claro que la misma justicia lo soltó por “buena conducta” en la mitad de la pena. Está libre de culpa y cargo. Puede caminar y entrar a los negocios como cualquiera de nosotros.

 

Va a estar trabajando mañana en el encuentro de boxeo infantil.

 

Es cierto que merece la reinserción en la sociedad.

 

Pero me parece que no es el momento para que esté con niños y niñas. Al menos yo no lo veo de esa manera. Seguramente estaré equivocado. Pero el mensaje deber ser claro.

 

No quiero mentirme. No quiero mentirles a los lectores de este medio. Que son muchos y que son críticos. No puedo estar mañana allí.

 

Durante estos días lo he hablado con mucha gente. Lo hablé con mi familia, con mis compañeros de los medios. Lo hablé con los más radicalizados quienes señalan que al violador “no hay que darle ni siquiera un vaso con agua”, como así también lo hablé con gente que señala que el perdón es el camino.

 

Lo hablé con mujeres y lo hablé con varones. Lo hablé con el organizador de este encuentro deportivo. Lo hablé con periodistas y con abogados. Lo hablé con docentes y con militantes. Lo hablé con políticos y con amigos. Lo hablé con referentes del deporte y con personas que trabajan en cuestiones que tiene que ver con la vulnerabilidad de derechos. Todos tienen  distintas opiniones. Todas me sirvieron.

 

Lo hablé con la familia de la víctima, del cual aprovecho este medio y les mando un fuerte abrazo. Envidio la templanza de ellos. Yo no sé cómo actuaría.

 

Hay algo que tengo claro. No puede ser todo lo mismo. Me hace ruido la panza. Soy un férreo defensor del deporte social e inclusivo.

 

Intento que el mensaje sea claro. Desde los medios debemos dar un mensaje claro.

 

Prefiero no estar. Porque no sé cómo reaccionaría (texto: Carlos “el Chavo” Ortiz).

 

¿QUÉ TE PARECIÓ LA NOTA?
Ocurrió un error