El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que afecta a millones de personas en el mundo, caracterizada por un deterioro progresivo de la memoria, el pensamiento y el comportamiento. Según la Asociación del Alzheimer, con sede en Chicago, el primer tipo de recuerdo que suele perderse está relacionado con eventos recientes o información recién aprendida, un síntoma que muchas veces pasa desapercibido en las primeras etapas.
Un informe del portal chileno La Tercera señala que los pacientes con Alzheimer olvidan rápidamente conversaciones recientes, actividades diarias o datos recién recibidos. Esta pérdida no es un simple olvido, sino un deterioro cognitivo que puede agravarse si no se detecta a tiempo.
Las 10 señales del Alzheimer que no hay que ignorar
La Asociación del Alzheimer señala diez señales tempranas para identificar esta enfermedad y facilitar un diagnóstico precoz:
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Cambios en la memoria a corto plazo: olvido de eventos recientes o repetición constante de información.
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Dificultad para planificar o resolver problemas cotidianos, como seguir una receta o manejar las cuentas del hogar.
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Problemas para realizar tareas habituales en casa o el trabajo.
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Desorientación temporal y espacial, como perderse en lugares conocidos o olvidar fechas importantes.
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Problemas de percepción visual o espacial, dificultad para interpretar imágenes o colores.
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Trastornos en el lenguaje oral y escrito, como buscar palabras o usar términos erróneos.
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Colocar objetos en lugares inusuales y no recordarlo.
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Juicio deteriorado o decisiones erróneas, por ejemplo, caer en estafas o regalar dinero sin razón.
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Pérdida de interés en actividades sociales y aislamiento.
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Cambios en el estado de ánimo y personalidad, como irritabilidad, ansiedad o depresión.
¿Por qué es fundamental detectar el Alzheimer temprano?
Aunque actualmente no existe cura para el Alzheimer, un diagnóstico precoz permite ralentizar su avance y mejorar la calidad de vida del paciente y su entorno. Terapias, medicamentos y actividades cognitivas pueden ayudar a conservar funciones mentales por más tiempo.
El Alzheimer comienza con pequeños olvidos, pero su impacto crece si no se actúa rápido. Reconocer que la pérdida de memoria reciente es uno de los primeros síntomas puede marcar una gran diferencia en el tratamiento y cuidado del paciente.
O.P