13 de Septiembre de 2020
opinion |
Argonauta

Una película, una serie, un libro: hoy, la música

Nos pusimos melancólicos por los recitales y, por lo tanto, decidimos disfrutar de estas obras, que tienen la música como protagonista.

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A casi seis meses del comienzo, ya no tenemos ganas de hablar de la pandemia: nos quitó muchas cosas, desde la posibilidad de hacer lo que más nos gusta (viajar) hasta la chance de hacer planes, probar cosas nuevas y aventurarnos.

 

Una de las cosas que más extrañamos, y de la que se habló mucho recientemente, es la música en vivo. La sensación de estar en un recital es inigualable: personalmente, somos fanáticos del rock, pero creemos que todos se deben sentir igual cuando ven a alguien en el escenario que transmite lo que siente a través de su voz o los instrumentos.

 

En Esquel, había recitales a menudo, de todo tipo de música, y planes para llevar artistas de nivel nacional debieron ponerse en pausa. Hoy extrañamos la fila y la anticipación de entrar a un recital, de ver a los músicos que nos hacen sentir distinto con sus canciones, de tener un zumbido en los oídos durante tres días después, de amontonarnos con gente que siente lo mismo que nosotros.

 

Por eso, en esta ocasión, homenajeamos las maravillas de la música con una película, una serie y un libro.

 

 

La película de la semana

 

Amadeus (1984)

 

En cuanto quisimos elegir, vimos lo complicado que era. La música es la inspiración para muchas películas, sin contar los musicales, el género más obvio para esta sección. Varias han sido grandes ganadoras de premios, como Nace una estrella, La La Land, Los Miserables o Whiplash. Mamma Mia es nuestro guilty pleasure: por las dudas, esta es una expresión rara en inglés que quiere decir algo así como "algo que nos gusta, pero que en realidad sabemos que no nos debería gustar" (más literalmente, significa placer culposo, o algo similar). Se usa mucho para películas que no tienen ningún tipo de mensaje, o que no están bien hechas, pero que, sin embargo, por alguna razón, no podemos dejar de ver. El pianista, Fantasía... Esto es muy difícil.

 

Vamos al grano. Elegimos Amadeus, una película sobre Mozart. Pero no es una biografía: es más bien un relato de su vida, contado en recuerdos a través de su rival, Antonio Salieri. Según la leyenda, Salieri fue quien envenenó a Mozart, inculpándose en su lecho de muerte. Es allí donde cuenta los hechos, en su voz de narrador, desde la cama de un manicomio.

 

Así, la película se trata más de la envidia de Salieri, cuya maldición era tener el talento de un compositor de tercera, pero el oído de un músico de primera: por esta misma razón, sabía lo malo que era y lo bueno que era Mozart. Salieri odiaba a Mozart, pero amaba más la música.

 

Muchos han dicho que la película "ridiculiza" un poco a Mozart: para nosotros, en cambio, lo dramatiza, le da profundidad a su carácter, en lugar de dejarnos con la tradicional imagen de los músicos de antaño, especialmente en la música clásica. Con ese pelo y esos trajes, no es de extrañar que pensemos que era gente severa o muy formal (he aquí el retrato):

 

Sin embargo, a Mozart se lo ve, en la película, componiendo con alegría, divirtiéndose con su trabajo y con un buen gusto por el alcohol y las fiestas. Salieri lo sabotea, lo sigue, lo atosiga, afectando muchísimo su vida, sin que Mozart lo sepa.

 

La película es un drama excelente, con música fantástica y con una historia atrapante que te obligará a verla hasta el final.

 

Recomendada para: adultos y jóvenes.

 

Quiénes deben verla: quienes disfruten la música clásica. Quienes no, también.

 

Quiénes no deben verla: quienes prefieran no ver películas dramáticas.

 

Puntajes: IMDB - 8.3 de 10; Rotten Tomatoes - 95%; Filmaffinity - 7.7de 10

 

 

La serie de la semana

 

Luis Miguel

 

Bueno, esto se sale un poco del guión: debemos admitir que de Luis Miguel en particular, no somos muy fanáticos, pero Netflix insistió mucho con la publicidad y la terminamos viendo.

 

La verdad que nos sorprendió: la historia de vida del cantante es muy trágica y las incógnitas que lo rodean persisten hasta el día de hoy. Desde épocas de felicidad hasta los máximos momentos dramáticos, tiene de todo y, aunque bastante novelizado, no exagera demasiado.

 

Pareciera que la música es el centro de la vida del protagonista y de su familia. En nuestra opinión personal, creemos que daría igual si fuera la música, la pintura, el deporte, los negocios o cualquier rubro: la protagonista, en realidad, es la búsqueda del éxito. El padre de Luis Miguel es un músico frustrado que no pudo hacer realidad sus sueños (aunque lo intentó por todos los medios) y decide vivir a través de su hijo. Él se vuelve famoso de muy joven y, a lo largo de su vida, logra conservar esa fama: pero, a veces, no todo lo que brilla es oro, y su éxito no le traerá toda la felicidad.

 

La serie está muy bien hecha y es totalmente atrapante. Hasta ahora, tiene una sola temporada, pero la próxima está programada para 2021.

 

Recomendada para: adultos y jóvenes.

 

Quiénes deben verla: a quienes les guste Luis Miguel y quienes disfruten de un buen drama.

 

Quiénes no deben verla: quienes no tengan interés en series de tipo biográfico.

 

Puntajes: IMDB - 8.1 de 10; Rotten Tomatoes - 89%; Filmaffinity - 6.8 de 10

 

 

El libro de la semana

 

Algunas de mis canciones preferidas: «Only Love Can Break Your Heart», de Neil Young; «Last Night I Dreamed That Somebody Loved Me», de los Smiths; « Call Me», de Aretha Franklin; «I Don't Wan't to Talk About It», de quien sea. Y luego, «Love Hurts», «When Love Breaks Down» y «How Can You Mend a Broken Heart», y también «The Speed of Sound of Loneliness» y «She's Gone», y «I Just Don't Know What to Do with Myself», y qué sé yo. Hay canciones de éstas que he escuchado por término medio al menos una vez por semana (trescientas veces el primer mes, y después de vez en cuando) desde que tenía dieciséis, diecinueve o veintiún años. ¿Cómo no va a dejarte eso magullado por algún sitio? ¿Cómo no te va a convertir eso en una persona fácilmente rompible en mil trocitos, cuando tu primer amor se va al garete? ¿Qué fue primero: la música o la tristeza? ¿Me dio por escuchar música porque estaba triste? ¿O es que estaba triste porque escuchaba música? ¿No te convierten todos esos discos en una persona de tendencia melancólica?

 

Rob Fleming tiene una tienda de discos en Londres y solo vende los discos que le gustan a él. Sus compañeros de trabajo comparten su obsesión por la música y se dedican, durante todos sus días, a competir con sus conocimientos musicales, a hacer listas de lo que les gusta y de lo que detestan.

 

Su novia lo deja, a sus 36 años, para salir con uno de sus vecinos: dice que es a causa de la inmadurez de Rob. El libro comienza con una lista de sus rupturas más dolorosas, pero esta última novia no está entre ellas. "Si de verdad quisiste dejarme hecho polvo, tendrías que haberme conocido mucho antes", le dice el protagonista.

 

Sin embargo, Laura se encuentra en toda la novela (narrada en primera persona por Rob), aunque el verdadero protagonista no es ninguno de los dos, sino la música: cada aspecto de sus vidas y de los eventos que les ocurren es buscado, por los miembros de la tienda de discos, en las canciones de todo tipo de géneros musicales. "La verdad es que no existe una sola canción pop sobre la muerte", dice el protagonista, en un momento clave de la historia.

 

Es un libro bien escrito, con una narración particular, y en el que los amantes de la música encontrarán todo tipo de matices.

 

Recomendado para: jóvenes y adultos.

 

Quiénes deben evitarlo: lo ideal es empezar a leerlo y ver si agrada el estilo, ya que la narración en primera persona y con saltos de tiempo no es para todos.

 

Quiénes deben leerlo: cualquier persona que sepa sobre música y disfrute de la música.

 

Puntaje: Goodreads - 3.9 de 5

 

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