Chamorro denunció que la situación institucional del Concejo Deliberante se ve afectada por la falta de operatividad. "Estamos altamente preocupados por la situación, sobre todo por el funcionamiento del poder legislativo municipal que no está funcionando adecuadamente," afirmó la concejal. Según Chamorro, el Concejo está cerrado tanto para los concejales como para los vecinos, lo que se traduce en una serie de inconvenientes en la gestión y resolución de reclamos.
La edil subrayó que la modificación de la ordenanza de la Banca del Vecino restringe el acceso de los vecinos al poder legislativo, pero la actual situación de cierre total de las puertas del Concejo agravó el problema. Esto impidió que se resuelvan temas urgentes como el tarifazo en los servicios de luz y gas.
Chamorro también cuestionó la independencia de poderes en el municipio de Esquel. La concejal sugirió que la falta de funcionamiento del Concejo Deliberante beneficia al Ejecutivo, ya que evita el control y la supervisión de sus acciones. “En ningún momento de la historia de Esquel se dio esta situación,” señaló.
La concejal indicó que, debido al cierre del Concejo Deliberante, se vieron interrumpidos importantes trabajos y proyectos. "Estábamos trabajando en medio del receso y teníamos pautadas reuniones para tratar temas importantes, como la tarifa social y la revisión de servicios públicos," explicó Chamorro.
Según la concejal, las dificultades edilicias, como la falta de calefacción, no se resolvieron a pesar de que se había advertido sobre estos problemas desde el inicio de la gestión. "La situación del edificio y el cierre del Concejo parecen parte de una estrategia para evitar el control del poder Legislativo sobre el Ejecutivo," afirmó.
Por su parte, el concejal Martín Escalona, del bloque Unión por la Patria, coincidió en la necesidad de funcionamiento del Concejo Deliberante. “Lo que nosotros planteamos es la necesidad de funcionamiento. De hecho, vinimos acompañando a los vecinos durante el receso,” comentó Escalona. Explicó que el receso debería ser un período para ordenar y profundizar el trabajo legislativo, pero la falta de calefacción y otros problemas en el edificio del Concejo fueron utilizados como una excusa para paralizar su actividad.
“La falta de calefacción y el cierre del edificio cristalizan un proceso que ya veníamos viendo y exponiendo en las sesiones,” señaló. Criticó la falta de información y la falta de respuesta del Ejecutivo ante las dificultades edilicias, que incluyen problemas como la falta de papel y tóner, y la imposibilidad de realizar presentaciones o tratar propuestas.
Según el concejal, la situación del edificio del Concejo Deliberante no es nueva y debería haber sido abordada desde el inicio de la gestión.
O.P