El ataque armado ocurrió en el centro de Washington D.C. en la noche del miércoles, cuando un hombre abrió fuego frente al Museo Judío de la Capital durante un evento diplomático, asesinando a dos empleados de la embajada de Israel. Las autoridades estadounidenses investigan el hecho como un acto de odio antisemita.
Ataque durante una recepción diplomática
El tiroteo ocurrió alrededor de las 21:08, durante una actividad organizada por el Comité Judío Estadounidense (CJE), en el marco de una “Recepción de Jóvenes Diplomáticos” que reunía a profesionales judíos y miembros del cuerpo diplomático internacional. El evento se desarrollaba en el Museo Judío de la Capital, ubicado en el centro de la ciudad.
El atacante, identificado como Elias Rodríguez, de 30 años y residente de Chicago, se acercó a un grupo de personas que salía del museo y disparó contra ellos. Dos resultaron muertos en el acto. Rodríguez ingresó luego al edificio, donde fue reducido por el personal de seguridad. Durante su arresto gritó “¡Liberen Palestina!”.
Quiénes eran las víctimas
Las víctimas fueron identificadas como Yaron Lischinsky (30), ciudadano israelí y asistente de investigación en la embajada, y Sarah Milgrim (26), estadounidense que trabajaba en el área de diplomacia pública. Eran pareja y estaban comprometidos; planeaban casarse en Jerusalén la semana siguiente.
Ambos eran figuras activas en programas de diplomacia cultural y participación comunitaria, y habían sido reconocidos en el último año por sus aportes al fortalecimiento de relaciones bilaterales.
El atacante: militante radical y empleado administrativo
Rodríguez, de origen latino, trabajaba como especialista administrativo para la Asociación Americana de Osteopatía (AOA) y tenía antecedentes de militancia en grupos de extrema izquierda. En 2017 participó en protestas como miembro del Partido para el Socialismo y la Liberación, organización marxista-leninista que expresó respaldo a la causa palestina.
Fuentes policiales confirmaron que se investiga una posible conexión con movimientos radicalizados que promueven la confrontación contra objetivos judíos o israelíes.
Repercusiones políticas y diplomáticas
El ataque generó un amplio repudio en Estados Unidos e Israel. El expresidente Donald Trump calificó el hecho como un “acto vil de antisemitismo” y exigió mayor acción contra el extremismo. El secretario de Estado Marco Rubio y la secretaria de Seguridad Nacional Kristi Noem prometieron llevar al atacante “ante la justicia”.
Desde Israel, el primer ministro Benjamin Netanyahu habló de un “acto de terrorismo antisemita” y ordenó reforzar la seguridad en todas las embajadas. El presidente Isaac Herzog declaró que “Israel y EE. UU. permanecerán unidos en defensa de nuestros pueblos y valores compartidos”.
El ataque ocurre en un contexto de tensiones entre Washington y Tel Aviv por la guerra en Gaza. La exclusión de Israel del viaje de Trump a Medio Oriente fue interpretada como un nuevo signo del enfriamiento diplomático entre ambos países.
Investigación
El FBI, junto a la policía metropolitana de D.C., encabeza la investigación para determinar si Rodríguez actuó solo o si formaba parte de una célula radical organizada. Según NBC4, el museo había reforzado su seguridad ante el aumento de incidentes antisemitas y por la apertura de una exposición sobre comunidad LGBT.
O.P