La policía realizó un allanamiento en una vivienda de La Banda, Santiago del Estero, deteniendo a una mujer identificada como Fátima Juárez, quien fue acusada de golpear a su pequeño hijo de apenas un año y dos meses de edad, en un supuesto intento de venganza contra su ex pareja.
La historia cobró relevancia pública luego de que Sergio, el padre del menor y residente del barrio IV Centenario de La Banda, acudiera a la Comisaría Nº2 de la Mujer y la Familia para presentar una denuncia contra Juárez. Según el testimonio proporcionado por Sergio, había recibido impactantes videos y audios por WhatsApp, en los que se podía observar a Juárez maltratando al niño.
Esas perturbadoras imágenes estuvieron acompañadas por un mensaje que rezaba, "algún día al bebé le va a pasar algo, lo vas a ver a tu hijo retratado en todos lados", lo que generó una gran alarma en el denunciante. Los registros visuales mostraban el cruel acto de Juárez presionando la cara del menor con ambas piernas, mientras este lloraba desesperadamente.
Además de los videos, Sergio mencionó que su ex pareja le envió amenazas en forma de audios, afirmando, "voy a dejar unas pastillas para que tome y muera, realmente a mí ni me interesa". Asimismo, afirmó que Juárez le mandó fotos del niño con distintas heridas faciales, empeorando aún más la ya tensa situación. Según Sergio, estos actos de violencia eran una forma de represalia por la separación.
La intervención judicial fue rápida, a cargo de la fiscal Ximena Jeréz de la Unidad de Violencia de Género e Intrafamiliar, quien, tras evaluar las pruebas presentadas, ordenó la detención inmediata de Juárez. La policía, con mandato judicial en mano, llevó a cabo el arresto ayer en la residencia de la acusada, ubicada cerca de la Ruta 1 y las antiguas vías ferroviarias.
La tragedia de este pequeño no terminaba ahí. En un intento de proteger al menor, la Justicia tomó la decisión de dejar al niño bajo el cuidado de su abuela materna, intentando prevenir futuros episodios de violencia y procurando que reciba el amor y cuidado necesarios para su bienestar. Este caso es un urgente llamado de atención sobre la violencia doméstica y la importancia de proteger a los niños de sus efectos devastadores.