12 de Septiembre de 2019
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Intento de abuso en José de San Martín: la policía no respondió a su denuncia

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Una vecina de José de San Martín, Erica Huentelaf, se acercó a Red43 para hacer pública una denuncia, debido a un hecho que le ocurrió el domingo en su domicilio, alrededor de las 6 a. m.

 

Luego de festejar el cumpleaños de un amigo, este la llevó a su casa y, cuando estaba por acostarse, escuchó que forzaban su puerta. Ante esto, le pidió a su amigo que regrese. Este volvió, pero, al no ver a nadie, tras esperar un tiempo, se fue y ella, nuevamente, escuchó que intentaban forzar la puerta. Decidió llamar, esta vez, a un amigo policía, quien respondió que enviaría a uno de sus compañeros, ya que estaba como interno. La joven nunca vio pasar a la persona enviada, pese a que su ventana da a la calle y la localidad está sin luz hace varios días, por lo cual sería fácil ver un patrullero.

 

 

Erica creyó que era un inquilino de paso, ya que, en su edificio, hay varias personas que alquilan por noche y se confunden de departamento. Por lo tanto, intentó dormir: cuando despertó al poco tiempo, se dio cuenta de que había un individuo apoyado en su cama. La persona le dijo su nombre, Kevin, y ella se dio cuenta de que había estado también en el cumpleaños de su amigo. Ante esto, al darse cuenta de que lo conocía, ella intentó echarlo, pero el joven insistía, forcejeaba y le pedía que le diera un beso.

 

 

Cuando la joven le advirtió que había llamado a la policía, él se detuvo. Así, lo pudo echar a la cocina, a empujones, y se dio cuenta de que la puerta estaba cerrada, como ella la había dejado, con una vuelta de llave, sin señales de entrada forzada. Durante el hecho, ella le preguntaba repetidamente por dónde había entrado, hasta que finalmente el joven confesó que había sido por la ventana del baño.

 

 

Una vez que logró echarlo del departamento, llamó nuevamente a su amigo policía y le explicó lo que había sucedido. Él le dijo que llame al 101, ya que estaba de interno y encargado de otras cosas en ese momento. Al llamar, ella explicó nuevamente la situación. El policía que respondió su llamado le preguntó hace cuánto había sucedido y ella dijo que hace 10 minutos, ante lo que respondieron “Ah, a esta hora el pendejo debe estar en su casa”.

 

 

Al día siguiente, la dueña de los departamentos la convenció de hacer la denuncia y se la recibieron recién al día siguiente, por la mañana. Erica tiene un hijo de nueve años, que, por suerte, no se encontraba allí esa noche; además, hace menos de un mes, una mujer sufrió un hecho de violencia en la localidad, en un intento de abuso, donde le golpearon fuertemente la cabeza, por lo que aún se encuentra en recuperación. Explicó que estos hechos son frecuentes en la localidad.

 

 

Lo que pide es la sanción al individuo y a los policías que no respondieron ante su pedido de ayuda. Además, dio los nombres y apellidos de todas las personas involucradas. Mirá la historia completa:

 

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