David Cifuentes, funcionario de la Defensoría Pública, destacó la adhesión del Poder Judicial al cupo laboral trans y al explicar el inicio de la instancia de evaluación para ocupar un cargo en Comodoro, remarcó la importancia de avanzar “hacia un trabajo en condiciones de dignidad para personas que históricamente han sido segregadas y que cuentan con mayores dificultades para acceder, en igualdad de condiciones con otras personas que no integran el colectivo. Ahí está el punto. Eso genera una desigualdad aún mayor, partiendo de la base, de que hablamos de mujeres y otras disidencias. Es un avance progresivo”.
Y al explicar el proceso y la construcción de los equipos, sostuvo la necesidad de “sensibilizar” la mirada de los interlocutores. “Esa sería la primera acción para avanzar hacia una inclusión formal. Más allá de las capacitaciones formales que se han ido realizando en los últimos dos años como por ejemplo con la Ley Micaela; la sensibilización busca trabajar éste primer acercamiento a la integración trans”.
Ya se realizó una jornada que organizó la Secretaría de Mujer, Género, Juventud y Diversidad a través de Renata Hiller y de Daniela Andrade de la Agencia de Diversidad. “Hicimos un recorrido histórico acerca de la luche del colectivo LGTB y de las experiencia de quienes lo integran. Nos han contado las dificultades que se plantean para establecer igualdad de condiciones con quienes no integran el colectivo. Fue una jornada muy enriquecedora para quienes no están tan afines a éstas cuestiones”.
Cifuentes resaltó trabajar éstos aspectos cuando se plantea que una mujer, hombre o persona no binaria que se incluirá como compañero o como se identifique a la estructura. Indicó que ya se ha cerrado la inscripción para ser parte del concurso y que se transita la primera etapa, mediante entrevistas grupales. A partir de esto, se avanzará con el proceso de selección. “Esperábamos más inscriptos pero tuvimos en total doce personas. Sabemos que a veces existe mucho temor y mucho miedo. Quienes integran éste colectivo reconocen que hay un rechazo y que más allá de que era un llamado específico. No se exigía el título secundario. Estamos deseosos de que esto crezca, que no se queden en un solo cargo y que pueda haber nuevos concursos para que las personas trans se animen a presentarse ya no necesariamente para ocupar un cupo. El Poder Judicial tiene un ingreso democrático a través de un concurso formal, con antecedentes y esperamos que éste sea el comienzo de un proceso de incorporación progresivo”.
Cifuentes aclaró que la alternativa laboral se plantea como una “apertura” hacia nuevos estereotipos. “Una vez que sea seleccionada la persona e integre la planta permanente, podrá concursar para ascender dentro del escalafón. No se trata de un empleo temporal, ni una beca sino que es un trabajo formal y de planta permanente”.
En cuanto a las características del empleo, indicó que el principal requisito en este caso era integrar el colectivo trans y participar en clases virtuales de la Escuela de Capacitación Judicial para conocer la estructura y las funciones que cumplen las distintas agencias. “es algo que es accesible, no es para nada excluyente. Ojalá que en futuros llamados se sumen más inscriptas/os” concluyó Cifuentes quien respaldó el recorrido de lucha de las mujeres en el reconocimiento de derechos. “Está en cada uno de nosotros, poder avanzar hacia una inclusión real de todas las personas que puedan tener una identidad diversa, diferente a la nuestra e igualmente reconocerla como persona valorando lo que pueda aportar desde su lugar”.