El estudio sobre la marca de la zapatilla de Máximo Thomsen en el rostro de Fernando se realizó en la Patagonia

En el juicio de Fernando Báez Sosa en Dolores se llevó a cabo la audiencia para analizar los peritajes. Varios peritos hicieron foco en la similitud entre la zapatillas Cyclone negra con suela blanca del acusado Máximo Thomsen y la huella que presentaba Fernando.

El estudio realizado para llegar a esa instancia, se llama scopometría, significa: Estudio de autenticidad comparativo no invasivo. Se basa en la aplicación sistemática de técnicas físicas, para evaluar las características presentes en un ejemplar indubitado (original) y observar su existencia en la misma calidad en el ejemplar cuestionado. Puede ser aplicado sobre cualquier clase de objetos que hayan sido manufacturados en serie, siempre que se cuente con un ejemplar original para realizar el cotejo. Posibles elementos a analizar: papel-moneda, CDs, DVDs, prendas de vestir, calzado, tarjetas de crédito y débito, sellos, precintos, libros, etc.

La muestra se cotejó con los diseños de todos los calzados secuestrados en el lugar donde se encontraban los rugbiers: en total 14 pares. 

El estudio permite analizar: la marca y el modelo de la zapatilla que impactó en la cara de la víctima, a partir de un sistema digital que superpone las imágenes hasta que encuentra una foto "espejo" entre esa porción del calzado (generalmente, una parte de la suela) y la toma que retrata el impacto en el objeto, en este caso Fernando.

El peritaje se hizo en Tierra del Fuego, debido a que la Policía Científica de Tierra del Fuego cuenta con el único registro de pisadas de la Argentina, se trata de una base de datos de más de 10.000 suelas de calzado.

El inspector, Oscar Alfredo Barrios Kogan, ex integrante de la Policía Científica, explicó: "Tenemos una base de datos de alrededor de 10.000 modelos de calzado. Todas, en material fotográfico. Nos mandan las imágenes que se obtienen en las escenas del crimen. A partir de eso las calificamos en función de las figuras geométricas que conforman el diseño de la pisada. Luego se analiza la suela del calzado y cotejamos en nuestra base de datos".

Este Banco de Huellas es el único del país, el policía contó como surgió: "Se empezó a armar esta base de datos en 2004. Se fue conformando porque en nuestra región no obteníamos éxitos con el levantamiento de huellas papilares (dactilares). Aquí, por tener un clima subpolar ártico, andar con las manos enguantadas es natural. Así que, en cierta manera, esos resultados infructuosos nos llevaron a tener que valernos de alternativas, y fue entonces cuando buscamos seguir e identificar los rastros de pisadas. La base de datos la nutrimos de varias formas. Por un lado, a cada sospechoso arrestado se le toman fotografías de su calzado; también vamos a los comercios para conseguir imágenes de las suelas de los modelos nuevos, algo que también buscamos en Internet".

Por último, agregó: “Luego de identificar el modelo podemos individualizarlo, porque gracias a la técnica de scopometría analizamos, por ejemplo, si una suela tiene algo clavado o si está gastada de cierta forma por el uso, situación que se aclara en el informe que se envía a la Justicia. Todas esas pistas quedan representadas en la pisada. La suela es un sello, cuando caminás, sellás el piso".