Lago Puelo atraviesa otra temporada nuevamente marcada por la crisis hídrica, y el intendente Iván Fernández brindó detalles sobre el trabajo que se viene realizando para sostener el servicio ante un contexto especialmente adverso.
Según indicó, el municipio invirtió grandes sumas en reparaciones, nuevas perforaciones y mejoras en la infraestructura, pero reconoció que la situación sigue siendo compleja en algunos sectores. “Hemos invertido muchísimo dinero en reparaciones de bombas y perforaciones nuevas. Lo más complicado sigue siendo Golondrinas y Cerro Radal”, señaló el jefe comunal.
Recordó que la obra estructural y definitiva que se espera para Golondrina aún no se concreta, en parte por “la postura nacional respecto a las grandes obras públicas”.
Aun así, sostuvo que durante estos dos años de gestión trabajaron “para poder llevar un buen servicio a la comunidad y reducir al máximo los inconvenientes”, aunque admitió que siempre queda trabajo pendiente en un escenario de sequía prolongada.
Una nueva cisterna de hasta 500 mil litros
Fernández confirmó que el municipio firmó con Provincia la construcción de una cisterna de entre 400 y 500 mil litros, ubicada en cercanías de Defensa Civil.
Paralelamente, se ejecutan mejoras en diferentes tramos de distribución: “Estamos trabajando en redes de agua para llegar a todos los sectores de la mejor manera posible”, expresó.
La situación se agrava por el estado de las napas subterráneas, que este año alcanzaron niveles preocupantes: “Ya hay pozos que se están empezando a secar”, advirtió el intendente, quien atribuyó este escenario a la sequía que afecta a toda la Comarca.
O.P.