El famoso Muñeco de Nieve de Esquel, ubicado estratégicamente en la intersección de Avenida Ameghino y Avenida Holdich, no es simplemente un punto de visita; es un verdadero símbolo de la ciudad y un ícono que llama la atención de cada turista que ingresa a la localidad cordillerana chubutense.
El Muñeco de Nieve es un emblema que saluda al turista desde hace más de 40 años.
Este monumento, que en 2025 celebró sus primeros 46 años, se ha consolidado como un emblema para todos los vecinos de Esquel. Su origen se remonta a 1979, cuando fue creado por estudiantes y profesores de la Escuela Politécnica N° 701. El objetivo inicial de esta iniciativa era promocionar la Fiesta del Esquí, un evento que también nació en 1979 con carácter provincial para promover la “Nieve en Primavera”. En ese momento, la Municipalidad brindó su apoyo, con Blanca Valoggia (quien se desempeñaba como Secretaria o Directora de Cultura) a cargo de la gestión.
Fue creado por estudiantes y profesores de la Escuela Politécnica N° 701.
La huella de la Escuela N° 701 sigue viva en el paisaje de Esquel, ya que sus estudiantes participaron en la creación de obras que hoy son parte de la identidad de la ciudad, desde las bases del emblemático Muñeco de Nieve.
Testigo de la historia contemporánea
A lo largo de los años, el monumento ha trascendido su función de promoción turística, convirtiéndose en un testigo de la historia contemporánea de Esquel. Vecinos e instituciones se han encargado de su reacondicionamiento y protección, afianzándolo como un verdadero símbolo de la ciudad.
El Muñeco de Nieve ha sido incluido en diversas celebraciones y campañas de concientización, demostrando su capacidad para reflejar la vida comunitaria:
• Celebraciones: Ha sido vestido en ocasiones especiales, como para el Día del Bombero (que se conmemora el 2 de junio) y decorado para celebrar el centenario de la Asociación Española.
• Promoción Turística: En agosto de 2017, en el marco de la Fiesta Nacional del Esquí, el muñeco fue cubierto con chocolate, atrayendo a un gran número de visitantes que se acercaron a pesar de las bajas temperaturas.
• Concientización Social: Además de concientizar sobre el cáncer de mama, este ícono de la ciudad también jugó un papel crucial durante la pandemia de coronavirus. Ante el crecimiento de casos en Esquel, el Muñeco de Nieve apareció cubierto con un tapabocas y un mensaje contundente: “Nos cuidamos entre todos”. Esta campaña de concientización se lanzó a fines de octubre, complementando el pedido del intendente Sergio Ongarato a los vecinos para que tomaran las precauciones necesarias para evitar la propagación del virus.
Durante la pandemia de coronavirus, el Muñeco de Nieve apareció cubierto con un tapabocas y un mensaje contundente: “Nos cuidamos entre todos”.
El Muñeco de Nieve de Esquel no solo es un monumento que da la bienvenida a los visitantes; es una escultura dinámica que resume la historia, el trabajo (especialmente el de la Escuela Politécnica) y el espíritu compartido de la ciudad cordillerana. Es, sin dudas, un ícono perdurable de la historia en Patagonia.