El Ministerio de Salud, a través del Centro Integral de Tratamiento de las Problemáticas de Consumo Esquel, efectúa distintas acciones vinculadas a la prevención de las adicciones. Jornadas de integración, talleres abiertos y charlas forman parte del intenso trabajo que contempla la participación de otras instituciones del tejido social.
Al respecto, la directora del centro, Sol Zignago, destacó que “desde el espacio dependiente del Hospital Zonal Esquel se brinda asistencia a toda aquella persona con un consumo problemático de sustancias” y contó que “en el lugar atiende un grupo interdisciplinario conformado por psicólogos, trabajadores sociales y operadores, por ejemplo”.
Precisó que “los usuarios reciben un tratamiento ambulatorio con asistencia psicológica (individual- grupal) y participan asimismo en cursos de arte, música, invernáculo, estimulación cognitiva y literatura. Siempre los casos -agregó- son analizados de forma particular, de acuerdo a lo que el equipo técnico evalúa como mejor alternativa, para cada quien y para cada sistema familiar”.
Dejó en claro que las puertas del complejo, ubicado en calle Alberdi al 155, están abiertas a la comunidad en su conjunto, indicando que el servicio es totalmente gratuito.
Al mismo tiempo, ponderó que desde comienzo de año articulan acciones con múltiples instituciones como -por ejemplo- escuelas, donde se dictan talleres de reflexión y debate.
En los establecimientos educativos “trabajamos con los chicos en poder pensar cómo cuidarse y cómo decir que no”, manifestó y rescató luego la presencia con medidas concretas en sedes vecinales. “En el barrio Ceferino tenemos un espacio de juegoteca para niños de 8 a 14 años en una tarea de promoción de la salud y reivindicación del juego en la niñez”, informó.
A su vez, añadió que durante el 2016 “hemos avanzado en jornadas de capacitación destinadas a los equipos de los hospitales rurales del Área Programática”, pensando así en “mejorar la calidad de atención”. También se llevaron adelante instancias de formación para agentes sociales interesados en la temática.
Zignago reiteró que es crucial seguir potenciando el abordaje integral y, en esa línea, valoró el vínculo forjado con entidades deportivas, educativas y barriales, centros de salud, hospitales rurales y el municipio local, entre otros. “Intentamos enfrentar el tema en sus diferentes facetas”, manifestó.
Aseveró que el CIT pone fuerte énfasis en el “trabajo interinstitucional dada la complejidad de la problemática y la importancia de ofrecer una respuesta integral, que contemple del mejor modo posible las necesidades de las personas que atendemos en sus distintas aristas”.
Valoró como dato saliente que pudo concretarse “un acercamiento a los barrios de la localidad y a los vecinos que con tanto esfuerzo generan actividades deportivas y recreativas, acompañando el desarrollo de iniciativas barriales y aportando en la medida que las juntas así lo solicitan”.
Habló del trabajo realizado en el comedor del barrio Ceferino: “Se aborda una perspectiva de reducción de daños, entendiendo que se trata en principio y como urgente de minimizar los riesgos y fomentar el acercamiento y la accesibilidad de las personas en situación de calle a la alimentación, la salud y a espacios de tratamiento que posibiliten recrear un proyecto de vida”.
Agregó que “estamos enmarcados en la Ley de Salud Mental 26.657, en la que la decisión del usuario y las intervenciones respetuosas dan lugar a la propia responsabilidad y al cuidado comunitario de quienes padecen sufrimiento mental”.