Ayer se produjo un cruce de denuncias en Esquel, entre vecinos que tienen un conflicto de agrimensura. Lo ocurrido el miércoles inició cuando uno de ellos fue a tirarle el alambrado al otro, algo que ya había ocurrido, según el testimonio de los damnificados, en tres ocasiones previas.
La primera denuncia por lesiones y amenazas de muerte fue del propietario del terreno violentado. Aseguró que con su cuñado se acercaron a intentar dialogar, pero fueron amenazados por las dos personas que tiraron el alambrado (padre e hijo). Esto llevó a una pelea a golpes de puño e incluso dijeron que "les echaron el perro", que le mordió la pierna a uno de ellos.
Los otros involucrados en el conflicto indicaron que se generó por problemas de medianera y afirmaron que no recordaban con exactitud lo que ocurrió por las agresiones sufridas.
En todos los casos las lesiones fueron leves.