En los últimos tiempos, el Municipio de Esquel ha tenido que hacer frente a un conflicto creciente relacionado con la invasión de las líneas municipales en diversas zonas. Iván Pereira, gerente de la Unidad Ejecutora de Proyectos Municipales (UEPROMU), se refirió a este problema, destacando la importancia de regularizar las construcciones que se han edificado sobre estas líneas, tanto para la seguridad de los vecinos como para el futuro desarrollo urbano de la ciudad.
La invasión de líneas municipales: un riesgo latente
La invasión de la línea municipal es un problema que afecta no solo el ordenamiento territorial de la ciudad, sino también la correcta planificación de servicios públicos esenciales. "Cuando un vecino construye sobre una línea municipal, no solo está afectando la proyección de calles, sino también las redes de servicios fundamentales como el gas, el agua, la electricidad y las cloacas", explicó Pereira.
El riesgo de intervenir en estas áreas va más allá de la alteración del espacio público. Las redes de gas, por ejemplo, suelen ser troncales y operan con una presión mayor a la habitual. "Las redes troncales de gas son fundamentales para el suministro a toda la ciudad, y en algunos casos, están ubicadas precisamente en las proyecciones de calles o en terrenos que no deben ser invadidos. Si alguien construye sobre estas áreas, no solo está generando inconvenientes para la planificación de futuras obras, sino que podría estar exponiéndose a riesgos de seguridad muy serios", advirtió el gerente de UEPROMU.
El papel del municipio en la regularización
El Municipio de Esquel, a través de su gestión, tiene la responsabilidad de garantizar que las obras y construcciones se desarrollen dentro del marco legal y respeten las normativas urbanísticas y de seguridad. "El municipio no está actuando para despojar a los vecinos de sus viviendas ni para destruir lo que han construido, sino para evitar que situaciones de esta naturaleza generen riesgos mayores", subrayó Pereira.
En ese sentido, la tarea del municipio es doble: por un lado, está llevando a cabo un relevamiento de las invasiones a las líneas municipales, y por otro, está trabajando en conjunto con los vecinos para que regularicen su situación. "A través de un trabajo conjunto con agrimensores, estamos haciendo un trabajo de campo para identificar las áreas afectadas, y notificando a cada vecino que debe regularizar su situación. Sabemos que en muchos casos las construcciones ya están avanzadas, pero la regularización es necesaria para evitar problemas futuros tanto para ellos como para el resto de los vecinos", indicó Pereira.
La preocupación por la red de gas y otros servicios públicos
Uno de los casos más complejos se presenta en las invasiones que afectan a las redes troncales de gas, ya que cualquier alteración en estas puede tener consecuencias graves. "Ya hemos tenido un siniestro en el barrio, que afortunadamente no pasó a mayores, pero que nos dejó una lección clara: la falta de regularización de estas construcciones puede generar situaciones peligrosas", expresó Pereira. En este contexto, el municipio, junto con CAMUZZI (Cooperativa de Agua, Luz y Servicios Públicos de Esquel) y la cooperativa eléctrica, está trabajando de manera coordinada para evitar que los problemas se agraven.
La regularización como condición para el desarrollo de nuevas obras
Uno de los grandes desafíos derivados de esta situación es el impacto que las invasiones tienen en el inicio de nuevas obras. El municipio tiene proyectada la instalación de una red de gas para 43 lotes en el barrio Ceferino, pero el avance de esta obra está actualmente detenido debido a las invasiones sobre la línea municipal. "No podemos iniciar la obra hasta que no regularicen las construcciones que se encuentran sobre la línea de la calle. Es un proceso que lleva tiempo, pero es fundamental para que el proyecto avance y para evitar que otras personas, en el futuro, enfrenten situaciones similares", explicó Pereira.
Además de las redes de gas, el impacto de las invasiones también afecta la planificación de las redes de agua, cloacas y electricidad, todas esenciales para garantizar la calidad de vida de los vecinos. La regularización, por tanto, no solo beneficia a aquellos que viven en las zonas invadidas, sino que también tiene un impacto directo en el desarrollo de la ciudad y en el acceso equitativo a servicios básicos.
La digitalización y actualización de los planos catastrales: Un paso hacia el futuro
El municipio está trabajando en un plan integral que incluye la actualización y digitalización de los planos catastrales y las redes de servicios. "Estamos en proceso de digitalizar todas las redes municipales, lo que permitirá tener un control más preciso de las infraestructuras existentes y facilitará la gestión de futuras obras", señaló Pereira. Este avance no solo mejorará la planificación de proyectos, sino que también permitirá a los vecinos acceder a información más clara sobre las líneas municipales y las zonas donde no pueden construir.
La importancia de la concientización y la colaboración
Finalmente, Pereira destacó que la regularización de las construcciones sobre las líneas municipales es un trabajo que requiere de la colaboración de todos los actores involucrados. "Este no es un problema que el municipio pueda resolver solo. Es un trabajo en conjunto con los vecinos, las cooperativas de servicios y los profesionales del área", explicó. La clave, según Pereira, es lograr que los vecinos comprendan la importancia de regularizar sus construcciones para evitar consecuencias más graves en el futuro.
L.M.