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07 de Septiembre de 2024
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Un jubilado de 85 años tuvo ganas de ir al baño en un banco y no lo dejaron: se hizo pis encima

El hecho generó repudio en las redes sociales. Le dijeron que “era solo para los empleados”. Avergonzado y humillado, el hombre regresó a su casa para cambiarse y volver. Nadie le pidió disculpas.

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Fue un hecho que produjo un amplio repudio de todos los sectores de la sociedad:: un jubilado de 85 años estaba haciendo sus trámites  en una sucursal del Banco Nacióncuando sintió la necesidad de un baño. Solicitó permiso al personal del lugar, pero se lo negaron. “Es sólo para los empleados”, le dijeron con cero empatía. Pero la urgencia era real y la persona terminó orinándose encima.

 

 Avergonzado y humillado, el hombre regresó a su casa acompañado por su hijo para poder cambiarse. La familia hizo una denuncia pública que rápidamente se extendió por las redes sociales, los medios de comunicación y hasta la misma Legislatura Provincial, que estaba sesionando en Viedma.

 

 El hecho se produjo en las oficinas del banco en Catriel, ubicada sobre la avenida San Martín al 480. Esta persona concurría todos los meses para realizar sus trámites relacionados con la jubilación cuando sintió la imperiosa necesidad de pasar al baño; pero la normativa bancaria es que su uso esa limitado al personal de la entidad

 

Cuando se conoció el hecho, el municipio de la localidad petrolera ordenó una inspección del lugar y realizó una intimación para que el Banco ponga a disposición de sus clientes un sanitario. La propia jefa comunal, Daniela Salzotto, dijo que “si en el plazo otorgado no se cumple con lo solicitado vamos a proceder a la clausura como a cualquier comercio. No lo hacemos ahora porque es fecha de cobro y perjudicaríamos a los abuelos y es a quienes queremos proteger”.

 

 En la sesión de ayer de la Legislatura Provincial, el diputado Javier Acevedo (CC - ARI), expresó el repudio por lo sucedido en el Banco Nación de Catriel, donde a un hombre de 85 años se le negó el acceso al baño y fue sometido a una situación humillante.

 

 El descargo en las redes sociales vino por intermedio de una empleada de la sucursal. La mujer, que se animó a mostrar otra mirada del hecho, apuntó que “no somos inhumanos, cero empáticos, soretes o todo lo que se animan a opinar”, porque “el Banco no puede tener baño público” por “una cuestión de seguridad bancaria; nos guste o no”.

 

 

 

 

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