Las ventas de naftas y gasoil en Argentina experimentaron una fuerte caída durante 2024, con una disminución del 8,90% a nivel nacional, según los datos de la Secretaría de Energía. A lo largo del año, se despacharon un total de 16.863.611,96 metros cúbicos de combustibles, una cifra alarmante en comparación con el año anterior.
La baja en el consumo se reflejó especialmente en las categorías de mayor calidad. La nafta premium sufrió una caída interanual del 18,77%, mientras que las ventas de gasoil premium retrocedieron un 6,45%. Este comportamiento se atribuye en parte al aumento en los precios de los combustibles, que crecieron un 100% promedio en 2024, aunque quedaron por debajo de la inflación anual del 136,7%. Como resultado, muchos conductores optaron por alternativas más económicas, disminuyendo la demanda de productos premium.
A nivel provincial, la caída fue particularmente pronunciada en Formosa (-27,17%), Misiones (-25,29%) y Corrientes (-19,85%), donde la apreciación del peso desalentó a los consumidores de países vecinos a cargar combustible en Argentina. En contraste, la Ciudad de Buenos Aires registró una caída más moderada, con un descenso del 1,49%.
En cuanto a los tipos de combustible, la nafta súper presentó una caída más leve del 2,90%, mientras que el gasoil en general retrocedió un 13,13%. Estas cifras reflejan una tendencia generalizada hacia la disminución del consumo de combustibles más costosos, en un contexto económico desafiante para las familias argentinas.
Las provincias con mayor volumen de ventas fueron Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y la Ciudad de Buenos Aires, con la provincia de Buenos Aires liderando el ranking, con un total de 5.656.987.540 litros vendidos durante 2024.
M.M