En un procedimiento abreviado, la Fiscalía, la querella y la defensa particular acordaron la condena de una agente de la Comisaría de El Bolsón por el delito de vejaciones cometido en febrero de 2023. Según la acusación, la empleada policial obligó a una mujer detenida a realizar prácticas vejatorias y profirió amenazas durante su detención.
El acuerdo se sustentó en la evidencia recabada durante la investigación, que incluyó testimonios de la víctima y de otra detenida, declaraciones de familiares y personal policial, informes médicos y psicológicos que acreditaron el daño ocasionado, así como documentación interna que confirmaba la presencia y funciones de la imputada en el momento de los hechos. La víctima dio su consentimiento para esta vía de resolución.
Durante la audiencia, la acusada asumió su responsabilidad y aceptó la calificación legal del delito. Tras la homologación del acuerdo por parte del juez, se la declaró penalmente responsable de vejaciones, conforme al artículo 144 bis, inciso tercero del Código Penal.
Condena y pautas de conducta
La agente fue condenada a dos años de prisión de ejecución condicional, junto con cuatro años de inhabilitación especial para ejercer funciones relacionadas con la custodia de personas privadas de libertad. Además, se establecieron pautas de conducta específicas, como la prohibición de portar armas, realizar tareas de prevención con contacto ciudadano, acercarse o tener contacto con la víctima, presentarse periódicamente ante el IAPL y asistir obligatoriamente a un curso de derechos humanos. La definición de otras tareas administrativas quedó a cargo de la institución policial.
La resolución quedó firme tras la renuncia de las partes a los plazos procesales, marcando un antecedente en la zona sobre la responsabilidad penal y administrativa de los agentes de seguridad en casos de vejaciones a personas privadas de libertad.
O.P