RED43 opinion columnaAnálisisopinion 09 de Mayo de 2017 09 de Mayo de 2017 opinion | Hace 8 años - Por Redacción Red43 Opinión Francia frena el avance de la ultraderecha y le da un respiro a la Unión Europea Francia le dice “No” a la xenofobia y “Si” a la Unión Europea. Por Redacción Red43 Escuchar esta nota A+ A- La ultraderecha en Europa es un fenómeno que crece progresiva e ininterrumpidamente desde hace más de una década. En Francia con el Front National de Marine Le Pen, Holanda con el PVV de Geert Wilders, Italia con la Lega Nord e Inglaterra con el UKIP son sólo algunos de los países del Viejo Continente en los cuales los partidos de ultraderecha ganan terreno y mejoran sus rendimientos electorales. Las crisis que han sufrido las sociedades de los países desarrollados en los últimos años se debieron a que el mundo ya no es más exclusivamente de Occidente. Los nuevos emergentes, con China a la cabeza, al cual se suman Rusia, empezaron a modificar las relaciones del poder mundial. La riqueza se comienza a producir y a repartir de otra manera. El temor al terrorismo, sumado a la enorme cantidad de refugiados que se desplazaron hacia Europa occidental, hizo que los habitantes de ese continente se sintiesen amenazados, y con miedo a perder sus privilegios. Las fuerzas políticas que se nombraron anteriormente han venido a dar a esa reacción cultural una oferta política. Las elecciones en Europa vienen reflejando una sociedad descontenta que se recuesta cada vez a las propuestas xenófobas y anti-europeas de la ultraderecha. El escenario de polarización en las elecciones de Holanda a mediados de marzo de este año y las de Francia sucedidas este domingo son solo un ejemplo. Sin embargo, en ambas pudieron imponerse quienes aun apuestan a la unidad. Ayer en Francia, se pudo poner un nuevo freno al peligroso discurso populista que propone la derecha europea, la cual busca responsabilizar de los males que asolan a sus países a los inmigrantes, refugiados y a la misma Unión Europea. Macron, un político joven y liberal, se diferenció fácilmente reivindicando las banderas que la ultraderecha quería dar por derrotadas: la unidad europea, la fortaleza del euro como moneda común y la vigencia de un comercio multilateral pujante y lo más abierto posible. El “no” a Le Pen es un no a la xenofobia y un sí a la Unidad. Sin embargo, el acceso al balotaje debe mantener encendidas las luces de alarma en Europa. El mensaje de la sociedad francesa en estas elecciones fue claro, sin cambios, y con una Unión Europea más preocupada por el futuro de los bancos que por el de la gente, el bloque se desintegra. El país galo, se suma a quienes intentan darle una segunda oportunidad, ahora resta esperar lo que sucederá en las elecciones que se llevaran a cabo en Alemania durante el mes de septiembre. ¿QUÉ TE PARECIÓ LA NOTA? 0 0 {{positivos}} {{negativos}} Ocurrió un error