"Es una masacre", afirmaron las personas que se acercan este miércoles hasta la plaza de las favelas en Río de Janeiro para tratar de reconocer a sus familiares entre los cadáveres. Tras un ataque policial, los narcotraficantes respondieron con disparos, barricadas y bombas largadas desde drones. Más de 130 personas de las favelas de Alemano y Penha murieron, según las últimas actualizaciones de las cifras que recolectaron medios locales.
Por estas horas hay grandes dudas por la identidad del más del centenar de cadáveres que estaban en las calles de la ciudad, hasta donde fueron trasladados por los propios vecinos para que sus familiares pudieron identificarlos.
Pero en estos momentos hay denuncias de ejecuciones extrajudiciales, la Justicia brasileña y la ONU presionan al gobierno de Cláudio Castro para que explique cómo se llevó a cabo la acción contra el Comando Vermelho (CV).
Lo que no se sabe es que si todas las víctimas fatales eran sospechosos con orden judicial. Tampoco se publicaron los nombres de los 113 detenidos, lo que impide evaluar el impacto real sobre la estructura del Comando.
Respecto a los detenidos, medios locales revelaron que entre los capturados estaría Thiago "Belão" do Nascimento Mendes, señalado como lugarteniente de “Doca” Alves de Andrade, jefe regional de la organización Comando Vermelho que logró escapar.
Aún desconoce cuántas de los que murieron eran originarios de otras regiones del país o de las favelas. Es así que, con una carpa de servicio instalada en el patio del Detrán (Departamento de Tránsito) en el centro de Río, el equipo de la Defensoría Pública enfrenta el mayor desafío del operativo: identificar a las víctimas mortales del operativo policial.
Más de 40 personas trabajan en el lugar, ayudando y asistiendo a familiares directos o gente que pregunta por la identidad de los fallecidos. La defensora pública Mirela Assad reveló a O Globo que la cantidad de "muertos procedentes de otros estados es sorprendente, incluso sin un recuento oficial".
"Esto se evidencia en la gran cantidad de solicitudes de novias, amigos y conocidos, pero no necesariamente familiares", explicó Mirela. "Es aún más complicado entregar los cuerpos porque se requiere una declaración que permita la identificación por terceros, además de las labores de transporte", sumó. Los familiares hacen fila india para llegar hasta los cuerpos y tratar de identificar a quienes murieron tras la refriega.