La tranquilidad de la ciudad de Beltrán en el departamento de Robles, Santiago del Estero, se vio alterada recientemente por un alarmante caso de violencia doméstica. En el epicentro del conflicto se encuentra una mujer de 28 años, actualmente imputada bajo los graves cargos de "lesiones calificadas" y "amenazas".
Todo comenzó una noche cualquiera, cuando un hombre regresó tarde a su casa tras participar en un campeonato de fútbol. Al cruzar la puerta, encontró a su pareja abrumada por la furia. La tardanza, aparentemente trivial, se convirtió en la chispa que encendió una acalorada discusión entre la pareja.
Durante la discusión, el hombre, tratando de evitar mayores conflictos, decidió ir a acostarse. Sin embargo, mientras se encontraba en la cama, su pareja lo atacó arrojándole agua hirviendo que había calentado en una olla.
El agua caliente lo quemó en varias partes de su cuerpo, dejando marcas dolorosas en sus brazos, pecho, abdomen, hombro, cuello y pierna izquierda. Estas heridas resonarían como recordatorio permanente de aquella noche fatídica.
Rápidamente, el hombre, herido y en estado de shock, fue trasladado al Hospital Regional, donde el personal médico confirmó la gravedad del ataque al diagnosticarle quemaduras de primer y segundo grado. A pesar del dolor físico, el afectado reunió fuerzas para denunciar aquel atroz acto de violencia.
La mujer, objeto de sus acusaciones, fue aprehendida por las autoridades, un procedimiento usual en estos casos. No obstante, y en un giro controversial, fue puesta en libertad bajo ciertas condiciones.
El magistrado a cargo dictó una orden de alejamiento en favor de la víctima y dispuso que la acusada reciba atención psicológica especializada, un intento de confrontar e intentar resolver los antecedentes emocionales que podrían haber derivado en un acto tan extremo. Mientras tanto, la investigación continúa abierta, no sólo por las acusaciones presentadas por el hombre sino también por la contradenuncia de violencia doméstica que la mujer interpuso en contra de su pareja.