Hace años que no se produce una intervención integral y el deterioro se nota en cada esquina, uno de los tantos temas sin resolver de la Secretaria de Obras Públicas de Esquel.
Los nomencladores con los nombres y las numeraciones de las calles son claramente otra de las postales del abandono y el olvido que hay en Esquel. Sólo pensar que una familia de turistas podría ubicarse en la ciudad cordillerana sería una quimera.
Hubo de madera, hubo de chapa, pero ya no queda ninguno.
La prueba del informe es que, si bajas de La Hoya por avenida Alvear, hasta el centro no hay carteles nomencladores.
Sin dudas el Secretario de Obras Públicas municipal Alejandro Wengier deberá realizar un relevamiento y ponerse manos a la obra en el tema.
La situación es aún más crítica en los barrios y en las zonas periféricas, donde no hay señaladores.
Mirá el informe…y no te pierdas.