El hecho ocurrió ayer por la noche cuando el menor se encontraba jugando a la pelota y se le cayó un arco sobre la cabeza de manera inesperada, ocasionándole la muerte.
El accidente fatal sucedió cerca de la 01:30 en el Gimnasio Lucho Fernández de Río Gallegos cuando el joven de 13 años se encontraba entrenando con su equipo. Uno de los arcos cedió y golpeó en su cabeza. Llegó personal del Hospital Regional pero ya se encontraba sin signos vitales.
El Comisario Sergio Vera, manifestó que tomaron conocimiento del hecho alrededor de la 01.30, y al llegar al lugar encontraron “al niño tirado en el suelo, al tiempo que ya se había requerido la presencia de personal del nosocomio local, quien determinó que ya estaba sin signos vitales”. Comentó, además, que estuvieron con los directivos del gimnasio y se llevaron a cabo todas las dirigencias con la División Criminalística y el Juzgado del Menor.
Fue “un caso muy fortuito” dijo el Comisario, agregando que “el niño es hijo de un efectivo policial”.
Por su parte Daniel Roquel, presidente del Concejo Deliberante a cargo de la Intendencia por ausencia Roberto Giubetich, manifestó que a las 07:00 se acercaron al gimnasio para interiorizarse sobre lo acontecido, y luego se reunieron con los padres del joven.
El papá se entrenaba con los amigos y en un momento de descanso entraron los chicos a jugar, se colgaron de un arco, se cayó y terminó golpeando en la cabeza.
“Hoy lo más importante es acompañar a la familia, la madre estaba destruida” dijo Roquel resaltando que lo más importante es acompañarlos “en estos momentos no quedan otras cosas, más allá de que es irreparable la perdida, después habrá que hacer una evaluación de las cosas que estaban mal hechas para que no se vuelva a repetir”, expuso.
Fuente Tiempo Sur/Tiempo FM
Foto La Opinión Austral