“Cuando corres sola, te enfrentás ante tu cabeza”

No es la primera vez que le pasa. Se dice en los pasillos que nadie, sobre todo los varones, quiere competir con ella. Camila les gana, a todas y a todos.

Ayer tomó parte de la prueba de 300 metros con vallas, donde terminó segunda, entre siete competidoras.

Claro que fue la única cordillerana y debió correr sola, contra su mente.

No es lo mismo correr sola, que tener rivales en los carriles de los costados. Allí fluye la adrenalina. Correr sola es casi como entrenar.

Camila Crozes está estudiando en La Plata y considera a Adriana Garzón como su “entrenadora del corazón”. Su prueba preferida es la de 400 metros con vallas, pero se sintió cómoda en la prueba corrida ayer donde logró un registro de 50seg 07dec, tres segundos más lenta que la trelewense Marlene Koss.