Desde este mes, la provincia de La Rioja introdujo una innovadora medida económica con la emisión de los "Chachos", denominados Bonos de Cancelación de Deuda (BOCADE). Inspirados en el legado del caudillo Ángel Vicente Peñaloza, estos bonos buscan revitalizar el circuito financiero local y estimular tanto el consumo como la economía regional.
Los "Chachos" tienen un valor equivalente de 1 a 1 con respecto al peso argentino y se emitirán en denominaciones de 1.000, 2.000, 5.000, 10.000, 20.000 y 50.000. Estos billetes ya están en circulación y podrán ser utilizados para la compra de productos en comercios adheridos, así como para el pago de servicios e impuestos provinciales.
El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, comenzó a pagar los salarios de junio utilizando exclusivamente estos "Chachos". Los altos funcionarios del Poder Ejecutivo provincial recibirán $100.000 en bonos "Chacho", mientras que los directores generales tienen un pago de $50.000 en la nueva cuasimoneda.
Esta iniciativa evoca recuerdos de anteriores experiencias económicas argentinas, como los "Patacones" emitidos por la provincia de Buenos Aires en 2001 y los "Lecop" lanzados a nivel nacional durante el mismo período.
Los "Patacones", emitidos bajo la administración de Carlos Ruckauf, fueron utilizados inicialmente para pagar salarios públicos pero luego se integraron en la economía local como medio de pago aceptado por comercios.
Los "Chachos" están diseñados con avanzados elementos de seguridad para prevenir falsificaciones. Estos incluyen papel de seguridad sin fluorescencia, fibrillas visibles e invisibles, marca de agua exclusiva y de fabricación registrada, numeración y códigos QR reactivos a la luz ultravioleta (UV), entre otros detalles técnicos que aseguran su autenticidad.
O.P