Anoche surgió una salida espontánea que comenzó en un grupo de whatsapp que convocó a más de cuarenta motores que se dieron cita para despedir el año de una manera especial. El movimiento comenzó a percibirse cerca de las 21.30 frente a la Sociedad Rural de Esquel, punto de partida desde el cual los motociclistas emprendieron viaje por la Ruta Nacional 40 Turística con destino al Pueblo del Molino. Este grupo, que ya consolida una comunidad de más de noventa integrantes a través de plataformas digitales, reunió a hombres y mujeres unidos por la misma pasión, sin distinción de marcas ni cilindradas.
Tras una emblemática parada frente al dragón de la plaza principal en Trevelin, la caravana motera recorrió la Avenida San Martín y cruzó el puente viejo sobre el río Percy. El trayecto continuó por la Ruta 71 hasta alcanzar el mirador, donde el paisaje se completó con una luna espectacular que iluminó la noche. En ese marco natural, los moteros compartieron mates y experiencias, fortaleciendo un vínculo que va más allá de los fierros. Gente de todas las edades y ambiciones, se ponen de acuerdo cada tanto en recorrer las rutas con otro ritmo. La mirada al paisaje, la forma de sentir el viento, la forma de andar y pensar la ruta se toma con otros tiempos y precauciones desde una motocicleta.
El cierre de la jornada tuvo lugar en el cruce de la Ruta Nacional 259, momento en que los participantes emprendieron el regreso a sus respectivos hogares con el compromiso de planificar próximas acciones de carácter solidario. Ante la creciente presencia de estos grupos en la zona, se apela a la conciencia de los automovilistas para que respeten a la motocicleta como un vehículo más en la calzada, efectuando los sobrepasos únicamente en sectores permitidos para garantizar la seguridad de todos en la ruta.
E.B.W.