El municipio de Esquel rindió homenaje a vecinos que, con su trabajo y dedicación, dejaron una huella imborrable en la comunidad. Durante la ceremonia, se reconoció la trayectoria de Alicia, Saturnino Navarro y Adriana Migur, figuras clave en la historia local por sus aportes a la educación, la industria y la cultura.
Alicia fue reconocida por su colaboración en la construcción del Colegio Salesiano, donde aportó su tiempo, entusiasmo y calidez. Su trabajo fue clave para preservar las tradiciones de la colectividad Sirio Libanesa.
Por su parte, se homenajeó la memoria de Saturnino Navarro, un inmigrante que llegó a Esquel en 1970 y se convirtió en el primer gerente de CORFO en la zona cordillerana. Entre sus logros se destaca el haber dirigido el aprovechamiento de la madera de la represa Futaleufú y haber reactivado aserraderos en la región, generando empleo y posibilitando la apertura de caminos turísticos.
Finalmente, se reconoció a Adriana Migur, quien llegó a Esquel de muy pequeña y se convirtió en una referente de la danza. Fundadora del Instituto de Cultura y Arte, fue directora y profesora por más de 25 años, formando a centenares de alumnas. Migur también se destacó por su compromiso social, donando las ganancias de sus festivales a entidades públicas como la Cooperadora del Hospital de Esquel.
T.B