El Horcón: Pinceladas de un discurso que esboza un liderazgo

Dejando claro su valoración de la situación del país “dañado en su tejido social y productivo” y destacando las “divisiones profundas” que se palpan en la actualidad, Alberto Fernández dio su discurso ante la Asamblea Legislativa prometiendo una transformación de la situación actual de Argentina.

El discurso -no por extenso dejo de ser interesante y de reafirmación de un estilo presidencial que pretende exhibir logros y planes de acción desde el comienzo- señaló el indiscutible flagelo de la pobreza y necesidad de detener el hecho que mayor número de argentinos caigan en ella. Además, se refirió a “recuperar trabajo” en nuestro país. Estos planteamientos fueron definidos por el presidente como el punto de partida de su “contrato de ciudadanía social” del cual ya explicó los logros obtenidos, según su visión y programas ya desarrollados.

Sin dudas, trabajo y alimentos están entre las principales preocupaciones de millones de argentinos. El país debate y sabe, por ejemplo, que no alcanza y muere pobre un jubilado que cobra la mínima o un poco más, mientras que paralelo a esto se discuten las jubilaciones de privilegio donde siguen los privilegios y las sumas jubilatorias exorbitantes que perciben algunos pocos privilegiados.

De la preocupante deuda del país con el FMI, dejó definiciones importantes como “nunca más a un endeudamiento insostenible”, calificada por el propio Fondo de esta forma, además que hoy compromete a muchas generaciones a futuro.

En cuanto a la inflación, otro punto preocupante y de gran incidencia en la economía de país y doméstica, Fernández se refirió fundamentalmente a fortalecer los mecanismos de defensa al consumidor ante los inescrupulosos precios que padecemos y donde los alimentos no paran de encarecerse. Veremos cuáles son esas medidas que se van a adoptar que incidan, verdaderamente, en la estructura y monopolio de los formadores de precios en nuestro país. 

La inminencia de proyectos de leyes también fueron ejes en el discurso, tal como el del aborto, que se discutirá sin demora en los próximos meses y sumirá al país en debate que seguramente ocupará los principales titulares; es innegable la necesidad de no dilatar más el tratamiento de este tema sensible, de salud y derechos. A esto se une el proyecto de ley para la salud integral de mujeres embarazadas y los primeros años de vida de los niños.

El desarrollo de la minería sigue siendo un objetivo y al olvidado polo científico tecnológico se comprometió a fortalecerlo. Entre los otros proyectos de leyes que se vienen está la reforma de la ley sobre economía del conocimiento, el proyecto de ley de hidrocarburos y tres proyectos relacionados con la soberanía de las Islas Malvinas. También se refirió al desarrollo de parques industriales, ¿Llegó, por fin, la hora del nuestro?

Además, refirió a otro tema que nos ocupa y nos preocupa por la gran crisis que atraviesa: la educación. Sobre ello se pretenden aplicar nuevos lineamientos en todos los niveles: primario, secundario y universitario.

Con la inseguridad se sigue sin saber qué hacer, no hay plan abarcador para combatirla.

Si bien estos son solo algunos de los temas que consideramos destacados en el discurso, toda la alocución de Fernández en un plan de trabajo que implica la participación integral y comprometida del gobierno que preside, donde la oposición juega un papel fundamental; son tiempos de construcción que necesita un país con dolor y carencias padecidas injustamente.

CHISTE DE YAPA

El psicólogo a su paciente:

-Señora para que pueda dormir bien no puede llevar los problemas a la cama…

-Si…bueno…pero mi marido no quiere dormir en el sofá…