“Solo un atleta olímpico sabe de la mochila que tiene Florencia sobre su espalda”

Florencia Romero no había terminado la escuela primaria, cuando la ganadora olímpica (y nuevamente record mundial) Liangmin Zhang participaba en sus primeros Juegos Paralímpicos.

Por ello uno podrá decir que Flor tiene varios Paralímpicos más para divertirse.

Zhang está a punto de cumplir 36 años y sus primeros juegos fueron en Atenas 2004, precisamente cuando Florencia tenía 8 años.

Señalámos esto para entender lo mucho que le falta por aprender, dentro del deporte de alto rendimiento, a la atleta oriunda de la Escuela Municipal de Esquel.

Por ello, luego de haber conseguido su diploma olímpico en Rio 2016, el objetivo de Flor era superar su propia marca personal y meterse nuevamente en las finales de lanzamiento de disco.

Cosa que no ocurrió. Y el deporte es así.

¿Si Messi perdió un partido 8 a 2 en un partido de la Champions, porque Flor no puede hacer dos lanzamientos nulos?

El tema es cómo se levanta de ese golpe. Messi se levantó meses más tarde cuando, con mucha presión mediática, tuvo en sus manos su primera copa con la camiseta argentina. Flor, con 25 años, todavía no tiene techo, por ende con dedicación, constancia, trabajo y entrenamiento, todo puede pasar.

TRAS LA BRONCA, UN MOMENTO INCREIBLE

“Cuando terminó la prueba de lanzamiento de disco, la primera sensación que tuve fue de bronca, porque consideré que Flor no alcanzó su propio objetivo, pero con el paso de las horas me quedé con esa sensación increíble de que ella tuvo nuevamente una oportunidad de estar en un Juego Paralímpico y, repito, eso es increíble”, según lo destacó Pablo Lara quien fue uno de los profesores que cobijó a Florencia Romero en su paso por la Escuela Municipal de Educación Física Adaptada.

“Uno compite para superarse a sí mismo como objetivo principal de lo que hace el resultado en sí. Y es cierto que Flor no pudo cumplir con su objetivo y ella se siente mal con ella misma porque  debe tener una responsabilidad inmensa, donde calculo que solamente un atleta olímpico o de alto rendimiento debe saber la mochila que tiene ella tiene en su espalda”.

“Calculo, dice Lara, que la responsabilidad es para con ellos mismos, para con sus entrenadores, para con su equipo de trabajo para con su familia y ese es el sabor amargo que ella está percibiendo en estos momentos”.

“Todo es parte de un aprendizaje y que no tenga un buen resultado son cosas que le puedan pasar. Fíjate que la china que ganó la medalla de oro, ya era atleta Paralímpica y todavía Flor no había terminado la escuela primaria”.

Señalemos que mañana por la noche se viene otro desafío para Florencia Romero, ya que competirá en la prueba de Lanzamiento de Bala, donde su mejor marca es de 10mts 27cent.

Habrá que tener fe, como ella lo tiene y su familia siempre la tuvo.