Un ejemplo como deportista, pero más aún Florencia Romero es un ejemplo como persona.
Tiene 28 años, quedó ciega desde muy chiquita, pero tiene la increíble habilidad de ver mucho más que nosotros.
Parece broma, pero es muy en serio. Es media terca, cuando se le mete algo en la cabeza no para hasta lograrlo.
Participó en varios Mundiales, Juegos Olímpicos y Panamericanos, todos ellos dentro del atletismo tanto en lanzamiento de bala como en lanzamiento de disco.
Estuvo a dos centímetros (solo a dos centímetros) de clasificar a los Juegos Olímpicos de Paris. No pudo. Se reseteó. Se fue del atletismo por la puerta grande. Pero igual tiene la necesidad de conseguir una medalla paralímpica.
Ahora lo quiere hacer dentro del ParaCiclismo. Corrió en tándem con Jéssica Herpsomer. Necesita conseguir una bicicleta adaptada a su necesidad, bicicleta que cuesta 3.000 dólares. Nada le impide soñar. Conoció en otra vida al Yacaré Gómez ("lo tengo visto de otra vida", dijo). Forman una linda pareja, pero como "todo hijo de vecino" necesitan trabajar. Proyectos tienen, habrá que acompañarlos.
“Me recibí de profe de Educación Especial con orientación en Ciegos y Disminuidos Visuales. Hoy en día estoy estudiando la Licenciatura de Educación Especial”.
Estos son sus nuevos conocimientos, a los muchos que tiene, la increíble Florencia Romero.
¿Su nueva locura? Integrar la Selección Argentina de Paraciclismo. Se utilizan bicicletas dobles llamada támdem donde el ciego va atrás y el guía, claramente, va adelante.
Junto con Jessica Herpsomer, compitieron con una bicicleta de paseo en la Doble Lago Futalaufquen, donde la experiencia no fue para nada buena (en resultados) pero Flor ya quedó inoculada con este deporte.
“En los 30 kilómetros de la Doble Futalaufquen se salió la cadena diez veces, es decir ese tipo de bicicleta no sirve, de echo siguen en la bicicletería. Así que estamos tratando de recaudar los medios necesarios para comprar una bicicleta tándem”.
Esa bicicleta de competencia tiene un valor de 3.000 dólares. Mucha plata para una sola persona. Poca plata si entre muchos colaboran.
¿Y POR QUÉ SE TE OCURREN ESTAS LOCURAS?
“Porque lo que uno sueña se puede hacer realidad con disciplina, compromiso y responsabilidad. Sobre todo, con responsabilidad. Y porque tengo todavía la necesidad de ser medallista paralímpica”, destacó muy segura.
Desde hace algunos meses, Florencia vive en Esquel junto con su pareja David Gómez, judoca internacional. Representante del seleccionado argentino y próximo a viajar a Kazajistan, al Mundial de Judo.
“Yo lo vi por primera vez y dije, creo que lo conozco desde siempre, de otras vidas".
Se conocieron por Instragram. Forman una linda pareja, se ayudan mutuamente, claro que cada uno con su locura a cuesta.
“Para mí, Flor es también una gran compañera. Siempre lo cuento en todos lados. Yo salí de Formosa con un sueño de poder clasificar a un Juego Paralímpico. Y con ese deseo, llegué a Buenos Aires”, dijo el Yacaré Gómez.
“El primer año la pasé medio complicado en el CENARD, porque es muy duro estar lejos de la familia. Tenés que dejar todo. Día de la madre. Cumpleaños. En la semana no me acordaba porque entrenaba mucho. Pero sábados y domingos la pasaba muy mal".
"Flor para mi es un apoyo muy grande. Ella como atleta y yo como atleta. Me entendía a mí. Yo la entendía a ella. Cuando me dolía todo el cuerpo, era mi masajista, mi psicóloga. Entonces, nos apoyábamos entre los dos. Y bueno, es así que hasta hoy en día seguimos así".
SE RETIRÓ DEL ATLETISMO POR LA PUERTA GRANDE
Florencia Romero renunció al Seleccionado Argentino de Atletismo y, según ella, “se fue por la puerta grande”.
Participó en Mundiales, Juegos Paralímpicos y Torneo Parapanamericanos. Claro que en último ciclo olímpico sintió feas sensaciones.
“Yo estuve a dos centímetros de clasificar a París, para los Juegos Paraolímpicos. Me pedían 28.80 metros en lanzamiento de disco. Y tiré 28.78. Para otra persona hubiese sido terrible. Y dije, bueno, hasta acá llegué no es el círculo donde quiero estar. Mi cuerpo me lo está pidiendo. Mi alma, mi mente y mis emociones me están pidiendo que salga de acá”.
“El año pasado hablé con Yani (por Yanina Baliente), hablé con Pablo (por Lara), hablé con mis padres. Es que sentía que si yo dejaba la Selección estaba defraudando a alguien.
Pero si no la dejaba me defraudaba a mí misma. Así que hablé con ellos y todos claramente me apoyaron”.
Hasta acá llegué. No es por no haber clasificado a los juegos. Hay cosas mucho más importantes.
Yo no me escuché, tuve todo un año sin escucharme. Sin escuchar lo que me pedía mi cuerpo y todo terminó en un cáncer.
Así que uno tiene que saber cuándo frenar la situación. Y la situación de frenar era en ese momento. Pero, como te digo, uno como atleta de alto rendimiento, necesita a veces seguir siendo atleta de alto rendimiento.
Y más con mi edad, que no estoy grande, que puedo seguir haciéndolo. Y por ahí en las pocas veces que toqué la bici tuve esa sensación de libertad. Si, de libertad misma.
Nunca tuvo una vida fácil, ya de chiquita supo lo que era el cáncer. "Yo quedé ciega a causa de un cáncer infantil. A los 7 meses de edad me lo diagnosticaron. A los 8 años quedé ciega".
Pero gracias a su familia, amigos y sobre todo a sus entrenadores, siguió firme y erguida.
En el 2022 recibió otra noticia sobre esa palabra maldita. El cáncer. Producto de como dijo ella, por no escucharme. La operaron de urgencia, le quitaron un tumor maligno y le costó tiempo adaptarse. Intentó ir a los Juegos Paralímpicos de Paris y quedó afuera por un escaso dos centímetros.
LA FALTA DE TRABAJO
Aunque se recibió, es poco el trabajo que tiene. “Está muy complicado. Estoy haciendo poquititas suplencias. Así que, si me quieren contratar en algún lado, yo voy mucho por la accesibilidad, los derechos de las personas con discapacidad, más que Esquel es una ciudad turística.
“Quien quiera colaborar con el sueño también de la bici, me pueden escribir a mi Instagram, Si se animan a depositar en Mercado Pago para mi es mejor. Esto me da mucha vergüenza, pero bueno, mi alias es flor.belen.romero.
DAVID GÓMEZ, EL FORMOSEÑO PATAGÓNICO
En lo que respecta al "Yacaré" Gómez, también está desocupado. Aunque arrancó a dar clases martes y jueves de 18 a 19 horas en el Gimnasio Kraken, “a partir de los 5 años pueden ir a presenciar o a participar de la clase”.
A pesar de su juventud es un judoca de mucha experiencia. Es disminuido visual pero se maneja con mucha soltura. Y eso es bueno. David Gómez es formoseño, estuvo viviendo en el CENARD por muchos años y conoció a la querida Florencia Romero.
Ha trabajado con Alejandro Mansilla en la preparación de los equipos provinciales tanto para los Juegos EPADE como para los Juegos de la Araucanía. David es un chubutense más. Es un formoseño patagónico que vale la pena conocer
En los próximos días viajará con el seleccionado argentino a Kazajistan, donde participará en el Mundial de Judo que tendrá lugar desde el 13 al 15 de mayo. Lo hará en la categoría hasta 64 kg.