Un hecho insólito, cruel y repudiable generó indignación este fin de semana en la Ciudad de Buenos Aires. Un joven fue filmado por su amigo mientras robaba dos gansos de los Lagos de Palermo para luego trasladarlos hasta su casa y soltarlos en la pileta de su jardín, como si se tratara de un juego gracioso.
En el video se ve primero tira en la orilla migas de pan para que los animales se acerquen, y cuando empiezan a comer los toma bruscamente de la cabeza y los mete en un auto, que estaba estaciones sobre la avenida Sarmiento.
En una segunda secuencia, ya en su domicilio, se los ve nadando en una piscina con agua tratada con cloro, un ambiente completamente ajeno y dañino para su salud.
Las aves acuáticas, incluyendo a los gansos, son especialmente vulnerables al cloro y deben tener acceso a fuentes de agua limpia y no tratadas con químicos para poder realizar sus actividades naturales de acicalado y baño.
El episodio ocurrido en Palermo no solo constituye un robo, sino también un claro caso de maltrato animal, ya que estos animales fueron arrancados de su hábitat natural, donde pasan gran parte del día alternando entre el agua y la tierra para alimentarse de pasto y hierbas.
Al ser trasladados a una pileta de cemento con agua clorada, no solo quedaron aislados de su comunidad. sino que también fueron expuestos a un entorno hostil que puede afectar gravemente su bienestar.
SL